Los abogados de la duquesa de Sussex pidieron a un juez británico el martes que llegue a un acuerdo en su demanda contra un diario antes de que se vaya a juicio al señalar que la publicación de una carta “profundamente personal” enviada al padre de la duquesa fue “una simple y seria violación a sus derechos a la privacidad”.

El más reciente intento de Meghan por proteger su privacidad reveló más detalles de la relación con su padre, de quien se ha distanciado. Por su padre él afirma que ha sido denigrado al ser presentado como una persona que busca atención de forma deshonesta.

La duquesa, conocida antes como Meghan Markle, de 39 años, demandó a Associated Newspapers por invasión a la privacidad y violaciones a los derechos de autor por artículos publicados en febrero de 2019 en el Mail on Sunday y el sitio de MailOnline en los que se incluyeron fragmentos de una carta escrita a mano para su padre, Thomas Markle, después de su matrimonio con el príncipe Enrique en 2018.

Associated Newspapers responderá a las acusaciones y el juicio está programado para finales de año en la Corte Superior, en el que sería uno de los juicios civiles más prominentes de Londres en años.

La duquesa busca un juicio sumario que resulte a su favor y que se desestime la defensa del diario. Su abogado, Justin Rushbrooke, afirma que la editorial no tiene “posibilidades reales” de ganar el caso.

“En el fondo es un caso muy directo sobre la publicación ilegal de una carta privada”, dijo al comienzo de dos días de audiencia, realizados de forma remota por las restricciones de coronavirus.

Los abogados de la duquesa dicen que Thomas Markle, un cinefotógrafo de televisión retirado, le provocó angustia a Meghan y al príncipe Enrique antes de su boda en mayo de 2018 al conceder entrevistas a los medios y posar para fotos de los preparativos de la boda tomadas por una agencia de paparazzi. Al final el padre de la duquesa no asistió a la boda tras sufrir un ataque cardiaco.

Rushbrooke dijo que la carta de Meghan, enviada en agosto de 2018, fue “un mensaje de paz” cuya finalidad era hacer que “él dejara de hablar con la prensa”.

Agregó que la duquesa tomó medidas para asegurar que la carta de cinco páginas y 1.250 palabras no fuese interceptada, enviándola a través de su contador a la casa de su padre en México. En la carta le imploraba a Thomas Markle que dejara de hablar con los medios diciendo: “tus acciones han roto mi corazón en un millón de pedazos”

Las últimas frases, leídas en corte, decían: “No pido otra cosa fuera de paz, y te deseo lo mismo”.

Rushbrooke dijo que el hecho de que la duquesa sea una figura pública “no reduce su expectativa de privacidad en relación a información de este tipo”.

Agregó que “las tristes complejidades de una relación familiar ... no son asuntos de interés público”.

Los abogados de Associated Newspapers afirman que Meghan escribió la carta sabiendo que eventualmente sería publicada. Dijeron que se volvió de dominio público cuando amigos de la duquesa la describieron en entrevistas anónimas con la revista People.

Thomas Markle dijo que permitió que el Mail publicara fragmentos de la carta para “aclarar las cosas” tras el artículo de People.

En una declaración escrita como testigo, presentada por la defensa, Markle dijo que el artículo había presentado una “imagen inapropiada de los contenidos de la carta y mi respuesta y me había denigrado al hacer parecer que era deshonesto, abusivo, en busca de publicidad, descuidado e insensible dejando devastada a una hija leal y diligente”.

“Tuve que defenderme contra ese ataque”, dijo.

“La carta no fue un intento de reconciliación. Fue una crítica en mi contra”, agregó Markle. “En la carta no decía que me amaba, ni siquiera preguntaba cómo estaba. No mostraba preocupación por el hecho de que había sufrido un ataque cardiaco y no hacía ninguna pregunta sobre mi salud. De hecho señaló el final de nuestra relación, no una reconciliación”.

En octubre el juez Mark Warby accedió a la solicitud de Meghan de posponer el juicio, programado para este mes, hasta octubre o noviembre de 2021. Dijo que el motivo para retrasar el juicio debería permanecer en secreto.

Meghan, una actriz estadounidense y estrella del drama legal “Suits” se casó con Enrique, uno de los nietos de la reina Isabel II, en una fastuosa ceremonia en el Castillo de Windsor en mayo de 2018. Su hijo Archie nació al año siguiente.

Hace un año Meghan y Enrique anunciaron que renunciaban a sus deberes reales y se mudaban a Norteamérica, afirmando que había intrusiones insoportables y actitudes racistas en los medios británicos. Recientemente compraron una casa en Santa Barbara, California.