Más estadounidenses solicitaron asistencia pública por desempleo la semana pasada, pero los despidos siguen en mínimos históricos.

Las solicitudes del seguro por desempleo aumentaron de 14,000 a 202,000 la semana que finalizó el 26 de marzo, informó el jueves el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos. El recuento de 188,000 solicitudes de la semana previa fue el menor desde 1969. Este indicador por lo general sigue el ritmo de los despidos.

El promedio de cuatro semanas, que es menos volátil, cayó a 208,500 desde 212,000 de la semana anterior.

En total, 1,307,000 estadounidenses pidieron el subsidio durante la semana que finalizó el 19 de marzo, la menor cantidad desde diciembre de 1969.

Los empleadores agregaron 678,000 empleos en febrero, según datos gubernamentales recientes, el total mensual más grande desde julio. La tasa de desempleo cayó de 4% a 3.8% de enero a febrero, extendiendo su descenso a su nivel más bajo desde antes de que estallara la pandemia hace dos años. El viernes, el gobierno dará a conocer los datos sobre el mercado laboral en marzo y los analistas pronostican que la economía generó 477,500 empleos en el mes.

Las ofertas de trabajo se mantuvieron en un nivel casi récord en febrero, con pocos cambios respecto al mes anterior, continuando una tendencia que la Reserva Federal ve como un factor impulsor de la inflación.

Hace dos semanas, la Fed inició un esfuerzo arriesgado para controlar la peor inflación desde los años de 1980, elevando su tasa de interés de referencia a corto plazo y señalando hasta seis aumentos de tasas adicionales este año.

El aumento de un cuarto de punto en la tasa de referencia, que estaba en casi cero desde que se produjo la recesión pandémica hace dos años, marca el comienzo de su esfuerzo por frenar la fuerte inflación que siguió a la recuperación económica. Los aumentos de tasas eventualmente significarán préstamos más costosos para consumidores y empresas.