Washington. Ocho personas murieron tras un tiroteo que suscito este sábado en un centro comercial de la ciudad de Allen, que queda a 25 millas de Dallas, Texas, confirmó el jefe del cuerpo de bomberos en una conferencia de prensa.

Igualmente, durante la conferencia de prensa, confirmaron que otros tres perjudicados permanecen hospitalizadas en condición crítica. Mientras tanto, cuatro individuos se encuentran en condición estable.

Entre los fenecidos, la policía informó que siete personas fallecieron en el lugar del incidente, mientras que otros dos murieron mientras recibían asistencia médica en un hospital del área.

La cadena de noticias CNN informó en horas de la tarde confirmó que nueve víctimas fueron transportadas temprano en la tarde a distintos hospitales del área, además, agentes del Departamento de la Policía de Allen continúan evacuando a ciudadanos que se encontraban en el centro comercial.

Entre las víctimas, se encontraba un niño de cinco años, pero se desconoce si se encuentra entre los fenecidos. Además, el noticiero sostuvo que los perjudicados rondan hasta la edad de 61 años.

Mientras tanto, todavía no se ha informado la cantidad de víctimas mortales por el incidente violento que suscitó en horas de la tarde.

En cuanto a los autores del tiroteo, un efectivo policiacó disparó a un presunto sospechoso que tenía parafernalia militar, informó la cadena noticiosa estadounidense.

No obstante, la misma policía asegura que no hay un segundo sospechoso, como había trascendido en las pasadas horas.

Según el portal de noticias BNO, imágenes aéreas tomadas por un helicóptero de la prensa muestran los cuerpos de al menos cuatro personas, que yacen en el suelo.

La policía de Allen informó que se está llevando a cabo una investigación activa y pidió a los ciudadanos que eviten acercarse al área, un establecimiento llamado Allen Premium Outlets.

Estados Unidos ha sufrido al menos 198 tiroteos masivos en lo que va de año, según la organización Gun Violence Archive, que define los tiroteos masivos como aquellos en los que mueren cuatro o más personas, sin incluir al perpetrador del ataque.