Ogden, Utah. Un agente de la patrulla de caminos de Utah se llevó una sorpresa ayer al dar el alto a un auto que se desviaba tanto, que pensó que su ocupante necesitaba atención médica. Pero resultó que el conductor tenía apenas cinco años.

Rick Morgan dijo el que el niño no respondió a sus señales de luces, pero se detuvo cuando hizo sonar la sirena en la Interestatal 15 en Ogden.

“Me acerqué al vehículo esperaba encontrarme a alguien que necesitase una ambulancia o a los paramédicos", señaló Morgan.

Pero cuando la ventanilla se bajó, Morgan dijo que quedó bastante claro que “un conductor claramente menor de edad estaba al volante”.

El niño estaba sentado en el borde del asiento para alcanzar el pedal de freno, agregó el policía.

Cuando le preguntaron, el niño dijo que iba a la casa de su hermana -en California- contó Morgan. A otro agente le dijo que quería comprar un Lamborghini cuando llegase allí y le mostró su billetera con el dinero para hacerse con el auto de sus sueños: tres dólares.

Las autoridades contactaron con los padres, que se hicieron cargo del menor y del vehículo.