Son muchos los alcaldes que se están ajustando los pantalones y están empezando con la reducción de gastos para los actos de toma de posesión, entre estos los de Bayamón, Toa Alta, Morovis y Comerío. 

El que menos va a gastar de este cuarteto es el de Bayamón, Ramón Luis Rivera, que invertirá, como mucho, $2,000. 

“Di instrucciones de usar el Teatro Braulio Castillo porque me economiza el alquiler de tarimas, sillas, mesas… El único gasto que va a tener la juramentación es la merienda, que es la más sencilla e incluye, café, danish y frutas”, dijo Rivera, quien será juramentado por la jueza Mirinda Vicenty. 

Y otro que luego de los actos subirá al sexto piso a laborar es el alcalde de Vega Alta, Oscar “Can” Santiago.

“Entro el lunes 9 de enero. Voy a hacer un acto protocolar en el lobby de la alcaldía. No voy a tener ningún tipo de gasto”, agregó quien será juramentado por el exgobernador Aníbal Acevedo Vilá.

“Luego de la juramentación, nos vamos a trabajar, empezando por mí”, sostuvo.

Sin embargo, sí  invertirá $15,000, de los $35,000 que le dejaron presupuestados para celebrar la juramentación con el pueblo el viernes 13 de enero, en la plaza pública.

De 6:00 a 7:00 p.m. habrá una misa en la parroquia La Inmaculada Concepción de María, y luego en la plaza será juramentado nuevamente por Acevedo Vilá. 

Por su parte, la alcaldesa electa en Morovis, Carmen Maldonado, quien también juramenta el 9 de enero,  a partir de las 4:00 p.m., en la plaza pública, indicó que “hemos hecho todos los ajustes pertinentes para hacerlo lo más sencillo posible y no incurrir en gastos más allá de lo que corresponde”, más aun sabiendo que su Municipio está en déficit.

Los gastos, estimados en menos de $8,000, serán para tarima, sonido y lo básico necesario para estos eventos. No habrá comida para los invitados.

Será juramentada por la jueza Maite Oronoz y entre los que confirmaron asistencia está el exgobernador Rafael Hernández Colón.

Finalmente, otro que aunque tiene un superávit sabe lo que cuesta mantener un presupuesto balanceado es el alcalde de Comerío, que consolidó todas las actividades del mes para hacer una sola; la llamada “Fiesta de despedida de año”, que se celebró ayer a un costo aproximado de $35,000.