Ante la abrupta salida de Ricardo Rosselló como gobernador muchos se preguntan qué pasó con la hermosa perrita de impactantes ojos azules que llegó con la familia Rosselló a La Fortaleza.

La respuesta es una incógnita pues la perra – de la raza siberian husky- no ha sido vista por periodistas de este diario durante el fin de semana.

Mientras, la subsecretaria de prensa de La Fortaleza, Michelle de la Cruz, no supo precisar si Reina partió del Palacio de Santa Catalina con su familia adoptiva. Los Rosselló tienen también otra mascota; una perrita llamada Mimi.

Cuando Rosselló ganó la gobernación y se mudó a La Fortaleza llevó consigo a Reina, quien simpatizó de inmediato con su ternura hacia los visitantes, guardias y empleados del lugar.

Para entonces, la familia explicó que Reina había llegado al hogar en 2012 cuando fue adoptada tras haber tenido un tenebroso pasado con sus antiguos dueños.

La perrita, que aparentemente fue abandonada luego de ser explotada por años como una perra paridora a la que utilizaban para sacar dinero con la venta de sus cachorros, se acopló muy bien a su vida en La Fortaleza, donde pernoctó por los pasados dos años y medio.

De hecho, mientras Rosselló estuvo 17 días sin atender a los medios de comunicación del país (del 16 de julio hasta el 2 de agosto, fecha que se hizo efectiva su renuncia) fue Reina quien se dejó ver en varias instancias cerca de los jardines aledaños a la Sala de Prensa.