Con la inclusión de una regulación de las tragamonedas y presentando por separado un proyecto de ley para atender el actual impuesto de inventario, la Reforma Contributiva está encaminada para su aprobación en esta sesión legislativa y podría incluir una dramática reducción en el Impuesto de Ventas y Uso (IVU) por concepto de alimentos, informó el presidente de la comisión de Hacienda de la Cámara de Representantes, Antonio “Tony” Soto.

El representante que encabeza la evaluación de la reforma legislativa, dijo que enmendaron el proyecto de Reforma Contributiva para que el IVU entre alimentos preparados se reduzca a 1.5% en vez del 11% actual. La propuesta del gobernador Ricardo Rosselló en mayo era bajarlo de 11% a 7%.

“En vez de 11% pagaría 1.5%, él (Rosselló) prefiere el 7 en transacciones electrónicas, como fue su propuesta original. Nosotros entendemos que cualquier reducción debe aplicar a todo el mundo. Y creemos que lo más beneficioso sería reducir el IVU en alimentos de 11% a 1.5%. Eso es un alivio a todo el mundo y hay maneras de hacerlo”, sostuvo Soto. En entrevista telefónica con Primera Hora, Soto dijo que esta propuesta se ha consultado con personal de la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) y su único reparo es que lo que se apruebe debe tener forma de sufragarse, y no reducir el fondo general. “Y hemos identificado cómo hacerlo”, aseguró.

Soto no explicó cómo lo harían.

El gobierno dejaría de ganar $106 millones anuales con esta propuesta, dijo. Se trata básicamente de eliminar la parte estatal del IVU entre alimentos y solo quedaría el 1.5% que corresponde a los municipios.

La reforma, que sería aprobada en Cámara y Senado próximamente, incluye también unas reducción a las tasas contributivas a los individuos más generosas que las que prometió el gobernador y se mantiene el crédito al trabajo, que sería un ingreso para fomentar el trabajo formal en la isla que comenzaría en $300 y podría ascender a miles de dólares, y también se elimina el impuesto entre negocios conocido como “B2B”, agregó Soto.

A fiscalizar las maquinitas

También la Reforma incluye regular la industria de las tragamonedas. Dijo que el dinero que se recaude en esos equipos iría a los municipios, en sustitución del impuesto al inventario, que sería eliminado en un proyecto por separado.

En entrevista en WKAQ, Soto dijo que los proyectos de reforma son el resultado de un análisis que incluye más de 45 reuniones privadas, sobre 20 ponencias y vistas públicas.

“Estamos listos para aprobar un nuevo modelo contributivo, mejorado, que va a beneficiar más a la gente”, indicó Soto.

El legislador defendió la regulación de las tragamonedas, tema que por años ha generado controversias con sectores hoteleros, religiosos y en la misma legislatura. Dijo que se estima que hoy día hay unas 50,000 máquinas tragamonedas en la isla que operan sin ningún control del estado, y que con el proyecto de ley se reducirán a 20,000, que deberán estar conectadas a un servidor que permita su fiscalización a nivel central por parte del gobierno. Asimismo, los dueños de estos equipos serán sometidos a una verificación de antecedentes.

“Es una industria que ya existe en Puerto Rico, (pero) lo que existe hoy está por la libre”.