Un grupo de media docena de representantes del Partido Nuevo Progresista (PNP) a favor del Proyecto de la Cámara 1018, mejor conocida como la medida de ‘Libertad Religiosa’, se quedó esta tarde con las ganas de ir por encima del veto del Gobernador al no contar con los 24 votos requeridos en la sesión ordinaria de la Cámara. 

La semana pasada, el presidente Carlos "Johnny" Méndez, uno de los coautores del proyecto, dijo que tenía los votos para aprobarlo a pesar de que Rosselló vetó la medida. La Constitución dispone que se requieren dos terceras partes de los votos de cada cámara para pasarle por encima al veto de Rosselló, lo que ya ha ocurrido en dos ocasiones en este cuatrienio, por lo que la aprobación de la medida de libertad religiosa requeriría votos de la minoría.

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En declaraciones hechas hoy el conclave, que incluye al expresidente de la Cámara, José Aponte, y los representantes Maricarmen Mas, Michael Abid Quiñones, Eddie Charbonier, Félix Lassalle y Ángel Bulerín, dejó claro que la aprobación de la medida es un compromiso programático del actual gobierno.

“Este proyecto fue parte de nuestro compromiso con el pueblo de Puerto Rico en las pasadas elecciones. Hicimos campaña con esa promesa y el electorado avaló la misma en las urnas, contundentemente. En la página 169 del Plan para Puerto Rico, que es el programa de Gobierno del PNP, claramente dice: ‘nosotros nos comprometemos a proteger este derecho constitucional de libertad religiosa de cada ciudadano y a promover legislación a tales efectos’. Eso precisamente es lo que dice en el PC 1018’, señaló Mas, quien es representante el Distrito #19 de Mayagüez y San Germán.

Quiñones, quien representa el Distrito #22 de Utuado, lares, Adjuntas y Jayuya, solicitó a los representantes votar en el día de hoy sobre la medida para así ir por encima del veto del Gobernador. Hoy hay sesión de la Cámara, pero si no se vota hoy se puede dejar para la próxima sesión ordinaria. Las sesiones tradicionalmente son lunes y jueves.

“Siempre he estado claro que esto es importante para nosotros. Este fue uno de los compromisos que hice con mi gente del Distrito #22 y tenemos que cumplirlo”.

De la misma manera se expresaron Charbonier y Lassalle, quienes insistieron en que la medida es una de derechos civiles.

“La Unión Americana para las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés), avala la medida en Estados Unidos por ser una protectora de derechos. Esto es una medida que protege derechos y la ACLU, entidad que se distingue por proteger libertades, aprueba la iniciativa”, dijo Quiñones.

A principios de mes, Rosselló le dio veto expreso a la medida porque “nuestra administración tiene un compromiso inquebrantable con garantizar y proteger los derechos fundamentales de todos nuestros ciudadanos. Uno de los derechos más importantes de nuestro sistema republicano de Gobierno es la libertad religiosa”.