El primer día de negociación entre el liderato de la Unión de Trabajadores de la Industria y Riego (Utier) y directivos de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) terminó esta noche sin ningún acuerdo.

Ambas partes comenzaron esta mañana un proceso de mediación en el Negociado de Conciliación y Arbitraje del Departamento del Trabajo, en un intento de resolver el tranque en la negociación que busca darles un aumento salarial a los celadores de línea.

El diálogo comenzó a eso de las 9:00 a.m., cuando la mediadora Madeline Meliá se reunió solo con personal de la AEE para conocer qué ha ocurrido desde febrero pasado, cuando comenzaron las negociaciones. En el encuentro estuvieron el director de Recursos Humanos y Asuntos Laborales, Mark Thys; el portavoz de la negociación, Oscar Feliciano; así como la directora de la División de Asuntos Laborales, Brenda Colón.

A eso de las 11:00 a.m., la mediadora pasó entones a reunirse con el liderato de la Utier por separado. Entre estos se destacaban el presidente de la unión, Ángel Figueroa Jaramillo, y el vicepresidente, Freddy Martínez. También participaron varios celadores.

Ya en la tarde, las partes comenzaron a intercambiar propuestas. El contenido de las mismas no fue revelado. Se proyecta que la negociación se extienda hasta la noche.

El presidente de la Utier reveló que “estamos manejando los números para cerrar la negociación”.

Explicó que esta “no es una negociación tradicional”, pues a su juicio una solución a esta controversia sería trascendental para retener la fuga de celadores de línea hacia Estados Unidos. 

Por su parte, Martínez dijo que la Utier está confiada que este proceso que se ha comenzado en el Departamento del Trabajo rinda frutos.

“Esto es un asunto de país. A medida se sigan perdiendo los celadores de línea, se afecta la ciudadanía”, afirmó el líder sindical.

El director de Recursos Humanos de la AEE también destacó que la corporación pública está en la mejor disposición de negociar con la Utier.

“En la Autoridad acogimos la recomendación de la gobernadora (Wanda Vázquez). Vamos a negociar de buena fe y esperamos que este proceso rinda frutos”, manifestó.

Añadió que “el celador de líneas debe estar trabajando en las líneas (eléctricas) y no en las líneas de piquete”.

Mientras esta negociación se realizaba en el piso 7 del Departamento del Trabajo, frente a la agencia una veintena de celadores realizaban una manifestación.

La primera propuesta a la Utier fue que la AEE aumentara el salario de los celadores de línea de $20 la hora, que devenga en la actualidad, a unos $42 a $45. Lo que deseaban era igualarlo a lo que generan los celadores de la parte oeste de Estados Unidos.

La Unión alega que estas diferencias en salario han provocado que “paulatinamente” los celadores se vayan a Estados Unidos, generando así una disminución de 1,200 celadores que había para el año 2000 a 435 que hay en la actualidad.

La AEE, entretanto, ofrece un aumento de un 10% a un 15%, así como cambios en los deberes del puesto. Esta alternativa no ha sido aceptada por la unión.

Cabe destacar que desde mediados de octubre pasado las negociaciones han estado estancadas y desde el lunes de la semana pasada la Utier levantó un campamento frente a La Fortaleza. Esta última medida fue la que dio paso a la negociación ante el Departamento del Trabajo.

Figueroa Jaramillo denunció que desde La Fortaleza les han solicitado en múltiples ocasiones que remuevan el campamento. Dijo que la posición de la unión es mantenerlo allí hasta que culmine la negociación. De hecho, sostuvo que no descarta levantar otro campamento frente a la sede de Trabajo, en Hato Rey.

Por otro lado, la unión también espera que la gobernadora firme un proyecto de ley que le devolvería la licencia de accidentes a aquellos celadores que sufran de descargas eléctricas u otras emergencias relacionadas a su peligroso trabajo de arreglar el sistema eléctrico con líneas energizadas. La medida está en su escritorio desde la semana pasada.