La gobernadora Wanda Vázquez dio hoy la bienvenida a la rebaja al 7% en el IVU de los alimentos elaborados en aquellos establecimientos que cumplen con los requisitos impuestos por el Departamento de Hacienda, y calificó el cambio como “un beneficio al consumidor” con “una rebaja dramática en el pago”.

“Aquellos que por alguna razón no pueden hacer el alimento en su casa, por su trabajo, por diferentes situaciones, cuando vayan a los diferentes comercios que están identificados como que tienen, cualifican y están en el programa del 7% vamos a verlo en nuestro bolsillo al final del mes el ahorro que representa”, dijo la gobernadora en una visita a la panadería Castilla, en Bayamón, que es uno de los negocios que entró al programa.

“Cuando íbamos a pagar estos alimentos procesados estaba fuerte muchas veces para el consumidor. Así que, de alguna manera, incentivamos, no solamente la economía, sino, también, sobre todo, incentivamos los ahorros”, dijo la gobernadora.

Wanda Vázquez visitó la panadería Castilla, en Bayamón, que es uno de los negocios que entró al programa del 7%.

Según el secretario de Hacienda, Francisco Parés, aunque solo han entrado al programa 6,113 establecimientos, el 80% del consumo de alimentos preparados ya está bajo la rebaja al 7%. El secretario estimó en alrededor de 14,000 el total de establecimientos que vende alimentos elaborados. “La vasta mayoría de las ventas que se van a dar en Puerto Rico de alimentos preparados van a estar cubiertas por esa reducción en la tasa contributiva”, aseguró Parés.

El secretario estimó en $90 millones la cantidad de dinero que dejaría de recibir el fisco con este cambio, y que quedaría en el bolsillo del consumidor.

Los negocios que no cualifican, seguirían pagando el IVU (Impuesto de Ventas y Uso) al 11.5%. Parés estimó que los consumidores estarían favoreciendo los negocios al 7%, lo que a su vez movería a los negocios que todavía no han entrado al programa a entrar al mismo, toda vez que de no hacerlo quedarían en una desventaja competitiva.

Parés explicó que, si alguien acude a un establecimiento que no está en el programa de rebaja de IVU al 7%, se le cobrará el 11.5% regular, y no tendrá derecho a reclamar que se le cobre menos IVU. Por lo tanto, recomendó verificar en el portal cibernético de Hacienda cuáles son las localidades autorizadas. “Queda a consciencia de todos los consumidores decidir si van a sentarse a la mesa con un comerciante cumplidor o con un incumplidor”, dijo Parés.

El secretario repasó que, para cualificar, los negocios tienen que estar al día en la radicación de planillas de IVU; estar al día con sus cuentas contributivas o tener un plan de pago; y tener el terminal fiscal, que desde el 2015 debían tener todos aquellos negocios cuyo volumen de venta exceda los $125,000 anuales. Este nuevo programa, aseguró, busca fomentar el cumplimiento voluntario con las exigencias de Hacienda.

Agregó que, aquellos negocios que no han entrado al programa, una vez cumplan los requisitos pueden hacer su solicitud a través del sistema SURI y su solicitud se procesa de manera automática en menos de 48 horas, y “vas a recibir una autorización para vender a una tasa reducida”.

“En el pasado, siempre se le cobraba a los que pagaban y cumplían. Esta (rebaja de IVU) por primera vez le da una ventaja y les da unos incentivos a los cumplidores. Así que en ese sentido nos sentimos más satisfechos y van a ver un mayor cumplimiento de parte de esta industria”, vaticinó el secretario.

Parés insistió en que “contrario a lo que los detractores de esta iniciativa señalaban, vas a encontrar mucho mediano y pequeño comerciante”, al tiempo que mostraba una foto de un pequeño quiosco con el letrero de cumplimiento para vender al 7%.