Se estima que en Puerto Rico, unos ocho mil establecimientos comerciales, incluyendo restaurantes, barras, restaurantes de comida rápida, restaurantes chinos, chinchorros y carritos de comida, utilizan alrededor de 1,100 millones de sorbetos plásticos anualmente.

La astronómica cifra la ofrecieron hoy en una vista pública en la Cámara de Representantes, Miguel Portalatín Cánovas y Jessica Ríos, cuya empresa The Barmaid PR, distribuye en la Isla sorbetos reusables, biodegradables y de otros materiales ecoamigables, algunos de los cuáles los mostraron a los legisladores en el salón de audiencias Adolfo Dones de la Casa de las Leyes.

Los comerciantes estimaron que tomando en consideración que no todos los negocios abren los siete días de la semana, cada comercio utilizaría alrededor de 139,200 sorbetos plásticos.

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“La solución es comenzar por sustituir los sorbetos plásticos por sorbetos ecoamigables”, dijo Portalatín y dijo que hay una variedad de sorbetos sustitutos de los plásticos, entre los que mencionó los reusables de bambú, vidrio y metal.

Además, detalló que hay otros biodegradables como los que se hacen de las pepas de aguacate y de papel. También aludió a los sorbetos de plástico compostable, los que a su juicio “no son tan ecoamigables ya que no son biodegradables en el medio ambiente”.

La agrónoma Maribelle Marrero Vázquez, vicepresidenta de Asuntos Gubernamentales de la empresa de reciclaje ConWaste, indicó por su parte que en Puerto Rico no hay datos oficiales sobre la cantidad de sorbetos que se desechan a diario, mientras que en Estados Unidos, se descartan todos los días más de $500 millones de estos artículos plásticos.

Marrero Vázquez no pudo precisar tampoco si existen datos del porcentaje de sorbetos que se recogen en las limpiezas de las playas o cuerpos de agua en la Isla.

“Como ocurre con otros materiales o desperdicios, la disposición inadecuada de ellos es el problema ambiental principal”, indicó la agrónoma al respaldar en una vista pública el Proyecto de la Cámara 1746, que busca prohibir la venta y uso de sorbetos plásticos de un solo uso en establecimientos comerciales.

Marrero Vázquez sostuvo que tanto el sorbeto regular como el que se usa en las bebidas alcohólicas son artículos sustituibles, pero dijo que “realmente el asunto principal debe ser el reducir la generación de desperdicios en todas las áreas de la vida diaria, asunto que requiere campañas educativas bien diseñadas”.

La cooperativa orgánica Madre Tierra también favoreció la medida por entender que el proyecto resuelve “parte del problema y es un buen comienzo hacia otras iniciativas muy necesarias en la protección de nuestro ambiente”.

“También llamamos la atención sobre la necesidad de introducir legislación para la venta de agua en botellas plásticas. Al igual que los sorbetos y cubiertos, estas son utilizadas una sola vez por los consumidores”, advirtió el ingeniero Carlos Pacheco Irizarry, pasado presidente de la cooperativa agrícola constituida hace 17 años.

Jorge Carlos Rodríguez, presidente de Caribe Compostables dijo por su parte, que el proyecto de ley “tal como presentado solo tiene la buena intención de empezar a atender un problema, pero poco alcance y tampoco vemos su aplicabilidad o que sea práctico o siquiera que sea sanitariamente correcto”.