Las personas con impedimentos que desean acceder a los comercios ubicados frente a la zona del malecón de la Playa Húcares en Naguabo pasan serios problemas, ya que no cuentan con rampas en las aceras para entrar a los establecimientos. Además, los accesos están tan deteriorados que los llevan a transitar con sus sillas de ruedas por el medio de la carretera, exponiendo sus vidas.

Para colmo de males, esta población no cuenta con estacionamientos para ellos en la zona del malecón, los baños públicos están cerrados por problemas con las tuberías y muchos de los comercios, que fueron remodelados luego del embate del huracán María, no cuentan con servicios sanitarios aptos para minusválidos.

Un individuo que se enfrenta a estos obstáculos desde hace siete años es el artesano Roberto Collazo, quien cada fin de semana expone sus trabajos en la zona del malecón para buscar su sustento, al tiempo que atraviesa por las dificultades de no contar con áreas aptas para su desenvolvimiento.

“Llevo allí siete años como artesano. En toda esa acera no hay rampas y las aceras también están rotas. No hay acceso para entrar a los negocios. Se supone que en cada bocacalle haya rampa y no las hay”, explicó Collazo, quien optó por sugerir la creación de un vídeo para mostrar la realidad que viven las personas con impedimentos en la zona.

La secuencia presenta a un grupo de impedidos en sillas de ruedas siendo asistidos para subir a las aceras. También se evidencia cómo estos ciudadanos tienen que optar por utilizar la vía pública, junto con los vehículos, para recorrer la zona.

“Hicimos el vídeo, lo tiré en las redes sociales y llegó como a 5,000 views (vistas), pero ahí quedó”, dijo Collazo.

Otro que se ve afectado diariamente por estas situaciones es Miguel Lozada, billetero de profesión, que necesita el acceso a los comercios para hacer sus ventas y sustentarse económicamente.

“Diariamente, voy y no puedo subir a los restaurantes. Tengo que quedarme en la acera y a veces en la calle. Lo increíble es que todos los restaurantes han remodelado y no tienen rampas. Incluso, los baños no son accesibles para las sillas de ruedas. En la mayoría, la silla no entra”, explicó el Lozada, quien denunció que el municipio nunca ha abierto los servicios sanitarios que tiene en la zona porque “supuestamente, hay un problema pluvial. En realidad, no sé por qué no los quieren arreglar (el alcalde, Noé Marcano)”.

Para el 2017, Lozada hizo una querella en la Defensoría para las Personas con Impedimentos con relación a esta situación en el malecón y a la falta de un portón de acceso en el área de la pista atlética de Naguabo, pero no tuvo respuesta.

No fue hasta principios de julio que tanto Lozada como Collazo, junto con Carlos Iván Pérez, presidente de la Junta Comunitaria, pudieron reunirse con el alcalde para exponer la problemática.

“El alcalde nos dijo que ya habían hecho una tasación antes del huracán y que (la creación de rampas) salía sobre los $250 mil. Que se imagina que ahora los precios están más altos. También nos dijo que no tiene dinero, que están esperando un dinero que le asignen. Creo que se va a quedar en nada, como siempre”, dijo resignado Collazo.

Por su parte, Pérez espera que exista un plan B en caso de que la Junta de Supervisión Fiscal no apruebe los fondos que espera el municipio para trabajar en las rampas.

“El alcalde nos dijo que está sujeto a la Junta Fiscal para ver si recibe unos fondos y puede destinar parte de ese dinero a las rampas del malecón. Los fondos están sujetos a ser aprobados y, de no recibirse, sería interesante conocer qué plan alterno tiene el municipio”, sostuvo Pérez.

A su vez, el líder comunitario señaló a la Oficina de Gerencia de Permisos (OGPe) por no velar que en las remodelaciones de los comercios se construyeran rampas y baños para impedidos y responsabilizó al gobierno y a la empresa privada por no tener en cuenta las necesidades de esta población.

“Es responsabilidad de OGPe asegurarse que cada negocio cumplía con las rampas de impedidos. Me parece que la violación a los derechos de las personas con impedimentos es violentada por el gobierno y por el sector privado. Existen muchas personas con impedimentos que son altamente productivos, pero le cortamos sus alas y los hacemos, dentro de sus impedimentos, más dependientes del gobierno cuando eso no es lo que ellos quieren. La Defensoría de Personas Impedidas está en sindicatura y esto agrava el problema”, comentó Pérez. 

A su vez, Elvis Segarra, vicepresidente de la United Spinal Associate, y quien también estuvo en la reunión con el alcalde, lamentó que el municipio no pueda atender la situación con los baños que tiene en la zona y espera que en la próxima reunión, pautada para el 12 de septiembre, haya adelantos en las gestiones.

“Hay unas estructuras construidas por parte del municipio, pero tienen problemas con la tubería sanitaria. Las razones el alcalde no las pudo explicar y no parece que se estará solucionado pronto. Esperamos que puedan gestionar con Obras Públicas para la identificación de estacionamientos en la zona y que pueda hablar con los dos inquilinos que tiene en estructuras municipales para que retiren los letreros que establecen que los baños son solo para personas que consuman en el lugar, ya que estas son las únicas alternativas de baños que tienen las personas con impedimentos allí”, mencionó Segarra.

Primera Hora intentó entrevistar al alcalde, Noé Marcano, con relación a este asunto, pero no estuvo disponible.