EL CAIRO.— El gobierno egipcio acusó el miércoles a la oficina de derechos humanos de Naciones Unidas de politizar la muerte del expresidente de Egipto Mohammed Morsi, que se derrumbó esta semana en una corte de El Cairo durante su juicio.

El portavoz del Ministerio de Exteriores, Ahmed Hafez, tachó de inaceptables los comentarios de Rupert Colville, portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, que pidió una “investigación pronta, imparcial, exhaustiva y transparente” de la muerte de Morsi el lunes.

Las “inmaduras y politizadas” declaraciones de Colville encajan con las de un país que explota la muerte de Morsi por motivos políticos, afirmó Hafez, en una probable referencia a Turquía.

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que tenía estrechos lazos con Morsi y su movimiento Hermandad Musulmana, dijo que no creía que Morsi hubiera muerto por causas naturales.

Morsi, miembro de la ahora ilegalizada Hermandad Musulmana, fue enterrado el martes.