ESTAMBUL— Un empleado turco del consulado de Estados Unidos en Estambul ha sido acusado de espionaje y de tratar de derrocar al gobierno, y las autoridades han pedido sentenciarlo a cadena perpetua.

Metin Topuz lleva encarcelado desde octubre del 2017.

El expediente judicial de 78 páginas lo acusa de estar en “intenso contacto” con policías que realizaron una investigación anticorrupción en el 2013 que implicó a varios encumbrados funcionarios del gobierno.

El gobierno turco acusa al clérigo Fetula Gulen de usar ese informe anticorrupción como excusa para organizar un intento de golpe de estado, y lo tilda de terrorista. Gulen, basado en Estados Unidos, rechaza las acusaciones.

Un juez tendrá que decidir si el caso pasa a juicio.

El arresto de Topuz llevó a la suspensión de servicios de visados bilaterales por más de dos meses.