JOHANNESBURGO, Sudáfrica. La Organización Mundial de la Salud anunció que el brote más reciente del mortal virus del ébola en la República Democrática del Congo aún no se considera una emergencia de salud mundial. Sin embargo, algunos grupos de ayuda se alarmaron cuando la cifra de casos nuevos aumentó en más del doble este mes.

Luego de que la región ha sido comparada con una zona de guerra, de que ocasionalmente la población ha recurrido a la violencia para resistir a los trabajadores de salud, y de los casos confirmados en la transitada frontera con Uganda, el riesgo de una propagación regional es “muy alto”.

A continuación, presentamos un vistazo al brote que ha dejado 185 casos confirmados, incluidas 107 muertes, desde que el 1 de agosto se declaró oficialmente su existencia:

¿Qué es el ébola?

El ébola es un virus que sin las medidas preventivas adecuadas puede propagarse rápidamente y es letal hasta en 90% de los casos. Los síntomas incluyen fiebre, vómito, diarrea, dolor muscular y en ocasiones hemorragias internas y externas. Los síntomas pueden presentarse de dos a 21 días después del contagio, de acuerdo con la OMS.

El virus se propaga mediante el contacto cercano con fluidos corporales de las personas que presentaron los síntomas, y a través de objetos como sábanas que estén contaminadas.

Los trabajadores de salud se contagian a menudo, y las prácticas funerarias que requieren un contacto cercano con las víctimas del ébola también pueden propagar el virus.

Decenas de personas durante el brote actual han recibido uno de múltiples tratamientos experimentales, pero todavía falta estudiar a fondo sus efectos.

¿Por qué se compara a la región con una zona de guerra?

Varios grupos rebeldes están activos en el extremo nororiental del Congo y han matado a cientos de personas en los últimos años. Los ataques en la ciudad de Beni, que es el centro de las labores para contener el ébola, han traumatizado a la población, la cual puede ser recelosa de los forasteros.

Una huelga en la ciudad en protesta por un ataque obligó a suspender algunos días las labores de combate al virus, con resultados preocupantes.

La crucial labor para encontrar y dar seguimiento a sospechosos de haber tenido contacto con víctimas del ébola es menor en Beni que en otros lugares, indicó el ministerio de salud del Congo, lo que incrementa el riesgo de que el virus se propague sin ser detectado.

Los trabajadores sanitarios dijeron que están acompañados por guardias de las fuerzas de paz de las Naciones Unidas o por elementos de seguridad congoleños. Agregaron que todos los días escuchan disparos y que tienen que terminar de trabajar al atardecer para evitar que los rebeldes los capturen.

“Cuando llegamos al aeropuerto nos dimos cuenta que la zona tiene mucha presencia militar”, comentó la doctora Marie Claire Kolie, de la organización Alliance For International Medical Action. “Me asustó un poco, debo decir. Pero... no podemos abandonar a esta gente”.

Hubo un “avance extraordinario”, informó esta semana el ministerio de salud del Congo. Luego de que una víctima de ébola huyó a una “zona roja”, considerada inaccesible para los trabajadores sanitarios -uno de los mayores temores en este brote-, se sostuvieron extensas negociaciones con uno de los grupos armados más temidos, el Mai Mai, y este permitió que un equipo de vacunación ingresara a la zona.

¿Por qué hay resistencia entre la población?

Esta es la primera vez que un brote del ébola ocurre en esta parte del Congo, por lo que los trabajadores sanitarios deben explicar la importancia de efectuar entierros seguros y otras medidas preventivas. Sin embargo, algunos residentes se han negado a ser vacunados contra el ébola y huyeron, o atacaron a los equipos de salud, y en un caso escaparon con el cadáver de una víctima del virus. En una confrontación un voluntario de la Cruz Roja resultó gravemente herido.

Esto ha afectado las labores de contención. El sábado, el ministro de salud del Congo dijo que la mayoría de los casos confirmados de ébola en lo que va del mes no han sido incluidos en la lista de contactos conocidos, y la relación epidemiológica solo “se identificó tras una investigación profunda”.

Tras “muchas agresiones” contra los trabajadores sanitarios, el ministerio anunció este mes nuevas medidas en la ciudad de Beni. Dio autorización a los equipos de salud a llamar a las fuerzas de seguridad durante entierros seguros. También, indicó que habría sanciones penales contra aquellos que escondan a sospechosos de haber sido contagiados por el ébola o que no los lleven a los centros de tratamiento.

¿Existe una vacuna contra el ébola?

Sí, y ha demostrado ser altamente efectiva.

El miércoles, el ministerio de salud del Congo informó que más de 18,000 personas han sido vacunadas. La vacuna debe permanecer en lugares muy fríos, a menos de 76 grados Fahrenheit, lo que representa un desafío en el Congo con clima tropical, y que además no cuenta con una red eléctrica confiable.