Médicos Sin Fronteras (MSF) y SOS Mediterráneo rescataron este domingo con el barco humanitario Ocean Viking a otras 81 personas frente a las costas de Libia, su tercera operación de salvamento en tres días, que eleva a 251 la cifra de rescatados.

 MSF indicó en un comunicado que el grupo se encontraba en una barca de goma poco apta para la navegación.

 El Ocean Viking seguirá patrullando las aguas del Mediterráneo Central por si hay otras embarcaciones en peligro, pero ha iniciado ya los contactos con las autoridades marítimas que coordinan los rescates en esa zona de cara al desembarco seguro de esos migrantes.

 "Lo que es seguro es que MSF nunca devolverá a estas personas a Libia", añadió la ONG francesa.

 Según el coordinador general de MSF para Libia y las operaciones de rescate en el Mediterráneo Central, Sam Turner, la situación en esa país es "tan desesperada" que esos refugiados y migrantes "contemplan lanzarse al mar como la única opción para sobrevivir".

 "Los gobiernos europeos deben asumir su obligación legal y moral y poner en marcha un mecanismo europeo de respuesta y desembarco seguro que incluya la reubicación en la UE de los rescatados", añadió en el comunicado Raquel González, responsable de Relaciones Externas de MSF.

 El Ocean Viking tiene capacidad para hasta 300 personas, según añadieron a EFE fuentes de SOS Mediterráneo, la otra ONG que opera el Ocean Viking.

 El barco, que reemplaza al Aquarius, zarpó de Marsella el pasado domingo y alcanzó este jueves la zona del Mediterráneo Central en la que se concentran las operaciones de salvamento. El viernes rescató a 85 personas y este sábado a otras 85.