Los ministros del Gobierno de Jair Bolsonaro que disputaron cargos electivos superaron el rechazo de las encuestas y mostraron una fuerza sorprendente en los comicios legislativos y regionales celebrados este domingo en Brasil.

En línea con las presidenciales, en las que, pese al triunfo del exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva con un 48.4 %, Bolsonaro obtuvo un 43.2 %, por lo que habrá segunda vuelta, antiguos miembros del gabinete del líder ultraderechista obtuvieron un resultado notable.

Cinco exministros consiguieron un escaño en el Senado, cuatro en la Cámara de Diputados y otros dos están en liza por gobiernos regionales que se definirán en el balotaje del 30 de octubre.

La mayoría consiguió surfear unos índices de rechazo al Gobierno de Bolsonaro que en los dos últimos años se han movido entre un 45 y un 50 %, según encuestas.

El vicepresidente y general de la reserva Hamilton Mourao luchaba por ser senador por Rio Grande do Sul y fue elegido con un 44%.

En esa región, Onyx Lorenzoni, que ocupó los Ministerios de Presidencia, Secretaría General y Trabajo, se impuso en las elecciones a gobernador de Rio Grande do Sul, aunque disputará el balotaje con el socialdemócrata Eduardo Leite.

La exministra de Agricultura Tereza Cristina Correa, representante de la industria agropecuaria, fue elegida senadora con casi un 61%.

Derrotó por el escaño de Mato Grosso do Sul a otro exministro de Bolsonaro, Luiz Henrique Mandetta, que ocupó la cartera de Salud en los primeros meses de la pandemia de coronavirus y acabó despedido por el negacionismo del mandatario.

Otro protagonista de la errática gestión de la covid-19 fue el general Eduardo Pazuello.

Sin experiencia en el área, fue ministro de Salud en la peor fase de la pandemia y una comisión parlamentaria le acusó de haber agravado la crisis, lo que no impidió que sea el segundo candidato a diputado más votado en Río de Janeiro.

FUERTE TIRÓN EN SAO PAULO

En Sao Paulo, el estado más rico y poblado del país, el bolsonarismo exhibió un tirón que ninguna encuesta descifró.

El exministro de Infraestructura Tarcísio Gomes de Freitas ganó la primera vuelta por la Gobernación de Sao Paulo con un 42.3 % y se enfrentará en el balotaje al candidato de Lula, el exalcalde Fernando Haddad, que partía como favorito.

También contra todo pronóstico, el exministro de Ciencia y Tecnología Marcos Pontes, primer y único astronauta brasileño, venció al exgobernador Márcio França, aliado de Lula, en la pugna por el asiento del Senado por Sao Paulo.

Entre los candidatos a diputado más votados de Sao Paulo se situó el exministro de Medioambiente Ricardo Salles, investigado por favorecer a grupos de madereros.

Los también exministros Marcelo Álvaro Antonio (Turismo), que dejó el Gobierno por sospechas de corrupción, y Osmar Terra (Ciudadanía), también entraron a la Cámara de Diputados.

La pastora evangélica Damares Alves, exministra de la Mujer, Familia y Derechos Humanos, defensora de que “los niños vistan de azul y las niñas de rosa”, logró un asiento en el Senado.

En Brasilia derrotó a la exministra de la Secretaría de Gobierno Flávia Arruda, con un determinante apoyo de la primera dama, Michelle Bolsonaro, fuertemente vinculada con movimientos evangélicos.

En el Senado coincidirá con Sergio Moro, el juez que condenó y encarceló a Lula en juicios por corrupción, luego anulados, y después fue ministro de Seguridad con Bolsonaro, con quien se enemistó posteriormente.

Rogerio Marinho, exministro de Desarrollo Regional, también se sentará en el Senado a partir de 2023, tras vencer en Rio Grande do Norte.

Aunque no todo fueron alegrías.

Además de Mandetta y Arruda, otros tres exministros salieron derrotados: Gilson Machado (Turismo) perdió la elección al Senado; Joao Roma (Ciudadanía) se quedó fuera de la segunda vuelta por el Gobierno de Bahía y Abraham Weintraub (Educación) no consiguió un asiento en la Cámara Baja.