Rusia declaró el martes que “no tiene prisa” para reconocer el nuevo gobierno del Talibán en Afganistán y exhortó a realizar un diálogo que incluya a todas las fuerzas políticas del país.

Los civiles temen que los talibanes vuelvan a imponer el tipo de gobierno brutal que prácticamente eliminó los derechos de las mujeres.

El canciller Serguei Lavrov dijo que Rusia, “tal como todos los demás países... no tiene prisa” para reconocer el gobierno talibán. Al mismo tiempo, observó “señales alentadoras del Talibán, que ha declarado su deseo de formar un gobierno con la participación de otras fuerzas políticas”.

En Kabul, el Talibán proclamó una “amnistía” en todo el país y exhortó a las mujeres a unirse a su gobierno. Lavrov dijo que Moscú apoya “el inicio de un diálogo nacional inclusivo con la participación de todas las fuerzas políticas y religiosas en Afganistán”.

En 2003, Rusia designó al Talibán organización terrorista, pero desde entonces ha sido anfitrión de varias rondas de conversaciones, la más reciente de ellas en marzo, con la participación de la milicia.

Moscú libró una guerra de 10 años en Afganistán que culminó con el retiro de las fuerzas soviéticas, pero ha regresado en el terreno diplomático como mediador, buscando relacionarse con las distintas fracciones en pugna dentro del país al tratar de contrapesar la influencia de Washington.