El alto mando de la Policía indicó que no se descarta ningún ángulo en la investigación del asesinato de la fiscal Francelis Ortiz Pagán, registrado en la madrugada de hoy, martes, en Río Grande.

El teniente Carlos Nazario, jefe del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC), indicó que la pesquisa preliminar, a pocas horas de los hechos, mantiene vigente varias teorías sobre los motivos del crimen.

"Fue vilmente asesinada llegando a su residencia, cerca de la medianoche. Todos los ángulos de la investigación no se descartan, incluyendo el acecho, incluyendo que esté relacionado a su trabajo, a una venganza… No descartamos tampoco una tentativa de carjaking", sostuvo Nazario en entrevista radial con WKAQ.

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Los hechos fueron registrados hoy a eso de la 1:30 a.m., en la carretera PR-957, del barrio Guzmán Arriba en Río Grande.

De acuerdo con el comunicado de prensa de la Policía, la víctima de 42 años de edad, quien es fiscal del Tribunal de San Juan, “regresaba a su hogar cuando individuos que la perseguían le realizaron varios disparos resultando herida”. 

Por su parte, el superintendente de la Policía, José Caldero, abundo que la escena en la residencia tiene dos áreas.

"Una es cuando ella va a abrir el portón eléctrico (de la residencia). Ahí hay unos casquillos de bala", dijo Caldero a WKAQ 580. "El carro de ella (entra y) choca otro carro de la misma residencia. Ahí hay otros casquillos de bala".

No obstante, el jefe de la Uniformada agregó que "todavía es muy prematuro para una teoría. Hay que esperar para terminar las entrevistas para tener una teoría más clara.

Según la investigación preliminar, el esposo de Ortiz Pagán, el abogado Fermín Arraiza Navas, quien se encontraba en la residencia con una infante, hija de ambos, condujo con ellas en un auto Mini Copper hasta la estación de gasolina Total, ubicado en la carretera PR-185, del barrio Campo Rico en Canóvanas. Allí alertaron de la situación a los agentes de la Policía que se encontraban en el lugar. 

La fiscal fue llevada al Hospital de la Universidad de Puerto Rico en Carolina, donde se certificó su muerte. 

Nazario precisó que fiscales, investigadores de la policía y personal del Instituto de Ciencias Forenses conducen las entrevistas en la escena, así como el levantamiento de evidencia que ayude a encontrar pistas.

"Las circunstancias específicas no las tenemos claras todavía, pero sí fue llegando a su residencia", dijo Nazario. "Es un área bien apartada bien arriba, casi colindando con el municipio de Canóvanas, bien apartada con poca iluminación. Ella había salido de su turno de trabajo".

"Estamos investigando si (el ataque a tiros) fue en el trayecto o apenas llegando… Estamos con todos los recursos en la escena de ver por dónde podemos continuar con la investigación", afirmó.