Annelise Figueroa solicitó que se desestime la demanda federal en su contra que fue sometida por la viuda e hija de Maurice Spagnoletti, en la que se alega que ella y otros ejecutivos de Doral Bank y Doral Financial Corporation tuvieron que ver con el asesinato del entonces jefe de operaciones de la institución bancaria el 15 de junio de 2011.

En la moción sometida por su abogado Manuel Porro Vizcarra, Figueroa alega que no fue emplazada debidamente y que en ninguno de los 16 párrafos en que se le menciona en la demanda por muerte por negligencia ("wrongful death"), se indica que estuvo asociada con su asesinato.

"En ningún momento se menciona a Annelise como que le hiciera amenazas a Spagnoletti; todas las amenazas se asocian con los codemandados", alega la entonces vicepresidenta ejecutiva de operaciones de Doral Financial en la moción sometida ante la consideración del juez federal José A. Fusté.

"La demanda falla en señalar algún dato que vincule a Annelise con el asesinato de Spagnoletti, y evita alegar que ella personalmente hiciera algo en conección con la alegada conducta errónea", agregó en la moción, que también aclara que Figueroa no tenía poder ni era su responsabilidad proveer seguridad a Spagnoletti.

Agrega además que Figueroa fue despedida y ella presentó una reclamación a nivel federal en contra de Doral en la que se acusó a Spagnoletti de hostigarla y discriminar contra ella, y que personal del banco no hizo nada al respecto.

En agosto pasado, los codemandados Glen Wakeman, presidente de Doral Bank, y Enrique Ubarri Baragaño, vicepresidente, también solicitaron la desestimación de la demanda civil sometida en junio pasado por Marisa y Lucy Spagnoletti por la muerte negligente o asesinato del entonces ejecutivo bancario.

Wakeman y Ubarri Baragaño opinaron que la demanda era "especulativa, inverosímil, internamente inconsistente y deficiente legalmente". También la catalogaron como un "relato sensacionalista".

Según la demanda de la familia de Spagnoletti, éste recibió amenazas mientras estuvo en Doral por un periodo de nueve meses por percatarse presuntamente de posibles transacciones fraudulentas y por entender que había que despedir a Figueroa.

La demanda es por muerte por negligencia o asesinato, agresión y conspiración para cometer agresión, ataque y conspiración para cometer ataque, daño emocional y el RICO Act, de crimen organizado contra Wakeman, Ubarri Baragaño, Figueroa y el jefe de seguridad, José Robles.

El documento alega que el Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) investiga el caso como un asesinato coordinado y que tiene copias de las comunicaciones entre los demandados y la víctima, que supuestamente demuestran que los demandados tuvieron que ver con su muerte.

Con el recurso, las demandantes reclaman que se vea un juicio por jurado en relación a este caso y no establece una cantidad de dinero como reclamo por daños.

Spagnoletti residía en Nueva Jersey y comenzó a trabajar con Doral el 13 de septiembre de 2010. Fue asesinado a tiros mientras transitaba en su vehículo por el expreso Las Américas el 15 de junio de 2011 cuando iba de camino a su hogar en el Condado, en San Juan, tras salir de su trabajo en el banco.

En ese momento, las autoridades que investigaron preliminarmente el caso indicaron que se trató de un crimen planificado y no descartaron que estuviera relacionado con las investigaciones que el banquero realizaba en la institución bancaria.