Una medida legislativa propone establecer visitas conyugales en las cárceles de Puerto Rico, lo que le permitiría a un confinado sostener relaciones sexuales con sus parejas que estén en la libre comunidad.

“Una vez el confinado entra a la cárcel para extinguir su sentencia, es privado de muchos derechos y privilegios que podría gozar en la libre comunidad. Uno de estos privilegios es el poder interactuar íntimamente con sus parejas consensuales”, reza la exposición de motivos de la resolución conjunta de la Cámara 440, radicada el pasado 19 de enero.

“El debate sobre su eficacia es uno variado. Sin embargo, se ha establecido por expertos que sí puede ayudar a que la persona mejore en su desarrollo, y pudiera también mejorar en cuanto a conducta dentro de la institución”, agrega la exposición de motivos.

La legislación es del representante del Partido Nuevo Progresista (PNP), Néstor Alonso, quien entiende que las visitas conyugales pueden contribuir a la rehabilitación del confinado, en la que medida que fomentan el compartir de los reos con sus familias y parejas.

“Los confinados necesitan una integración social”, sostuvo Alonso.  “Que no salgan de la cárcel frustrados, sin ningún contacto social con la gente, lo que queremos es darle una calidad de vida mejor a los confinados”, agregó.

Las visitas conyugales no solo beneficiarían a matrimonios sino también a parejas consensuales, explicó.

Alonso dijo que en unos 16 estados de Estados Unidos y en países como Argentina, Colombia y República Dominicana los presos tienen la oportunidad de tener visitas conyugales. De hecho, recordó que en Puerto Rico había visitas conyugales en las cárceles para la época del 80 mediante un reglamento interno del Departamento de Corrección y Rehabilitación, pero el programa se eliminó cuando un reo asesinó a su pareja en una de esas visitas.

El representante afirmó que “ciertamente es una preocupación” la seguridad de las personas que participen de las visitas conyugales. Y es uno de los temas que tienen que definirse en vista pública junto a aspectos cómo las garantías de salubridad en los centros que se usarían para esas visitas conyugales.

También está por definirse en ese proceso de vistas públicas si las visitas conyugales serían un privilegio a base de buen comportamiento de los confinados, o qué reos se podrían beneficiar.

Alonso dijo que conversó preliminarmente sobre la medida con el secretario del DCR, Erik Y. Rolón, quien según el representante se expresó dispuesto a escuchar la propuesta, aunque adelantó que para ejecutarlo hay “consideraciones presupuestarias”. El representante explicó que habría que preparar lugares en los complejos carcelarios, que cumplan con seguridad y con salubridad, donde se establezcan esas visitas conyugales, lo que podría implicaría un costo económico para la agencia.

La medida fue referida a la Comisión de Seguridad Pública que preside el representante Félix Lasalle, que de inmediato no reaccionó a la medida.