El Ministerio Público radicó anoche cargos por violaciones a los artículos 3.1 (maltrato psicológico) y 3.2 (maltrato físico en presencia de menores) de la Ley 54 para la Prevención e Intervención con la Violencia Doméstica, contra el cadete Gilberto Pinto Brito quien se alega envió mensajes de texto y realizó llamadas profiriéndo palabras soeces a su exparejas a la que aredió con sus manos, acechó en su lugar de trabajo y la restringió la libertad.

La prueba se presentó ante la jueza Karina Díaz, del Tribunal de Humacao, quien determinó causa para arresto y expidió una orden de protección a su expareja.

El imputado de 34 años y vecino de Yabucoa, quedó en liberta al prestar una fianza de $75,000.00, quedando en libertad hasta la vista preliminar pautada para el 7 de noviembre.

La agente Ana Laboy, supervisada por el teniente Daniel Allende, adscritos a la División de Violencia Doméstica del CIC de Humacao, estuvieron a cargo de la investigación.

Anoche, en declaraciones escritas, el comisionado del Negociado de la Policía, Antonio López Figueroa, advirtió que cualquier empleado civil o miembros de la Uniformada que protagonice un hecho de violencia doméstica se enfrenta a todo el rigor de la Ley en el ámbito criminal y a los procesos internos de la agencia, a nivel administrativo, fiscalizados por el Tribunal federal, conforme a la Reforma Sostenible de la Policía.

“El más mínimo indicio de un acto de violencia doméstica da pie a que se investigue de manera rigurosa, y sus consecuencias son desde la radicación de cargos hasta la expulsión de la Policía, en el caso de que se le encuentre causa para arresto ante el Tribunal”.

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