Cargos criminales serán radicados durante la tarde de hoy contra el padrastro y la progenitora de la niña Amahai Viruet De Jesús, de tres años, quien murió el 11 de noviembre del 2019, tras recibir un disparo en la cabeza en su residencia del barrio Buena Vista, en Morovis, en circunstancias misteriosas.

La investigación reveló que el día de los hechos la niña se encontraba jugando con su hermanita, de cuatro años, en una de las habitaciones y mientras la mayor fue a la cocina para buscar unas fresas, Amahai tomó de una cartera de cintura el arma de fuego de su padrastro y, manipulándola, se disparó.

El informe de la trayectoria balística y los testimonios descubrieron que tras ocurrir el accidente el padrastro tomó el arma de fuego, salió del hogar y desde el exterior disparó hacia la ventana. Luego le sugirió a los investigadores que se trataba de una bala perdida. La prueba científica no es compatible con lo que declararon inicialmente.

Mientras la menor era transportada a un hospital, acompañada de su madre Lillybeth de Jesús Vega, de 31 años, su padrastro, Carlos Manuel Meléndez García, de 34 años, presuntamente lanzó el arma de fuego.

Los padres de la menor han invocado durante el proceso su derecho a no autoincriminarse.

Entre los cargos que se le radicaría al padrastro figura la violación a la Ley de Armas, maltrato de menores, brindar información falsa a las autoridades y destrucción de evidencia. Mientras que la madre será acusada por maltrato, ofrecer información falsa a las autoridades y encubrimiento.

Meléndez García estaba en libertad con un grillete electrónico tras prestar una fianza de $10,000 a través del Programa de Servicios con Antelación a Juicio al ser acusado por violación a la Ley de Armas luego de ocuparse un cargador con municiones en la vivienda, pero ningún arma de fuego.