La familia de Karla Nicole Rosario Martínez se mantiene aferrada a la fe y esperan que la joven de 15 años, que fuera atropellada por una guagua escolar el pasado miércoles en Morovis, saldrá del estado crítico que la mantiene recluida en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Pediátrico de Río Piedras.

Apoyada por decenas de compueblanos, Esmeralda Martínez, tía de la adolescente, indicó la tarde del domingo que “su estado es crítico, bien crítico”.

“Ella no ha perdido el conocimiento, la tienen inducida. Está dormida. La tienen con sus maquinitas porque como ella ya tuvo la primera operación y como tiene la pelvis rota y fracturada en varias partes, la tienen inducida porque son bastante fuertes los dolores que siente”, expresó la pariente, visiblemente afectada.

Martínez explicó que los médicos intentan estabilizarla para poder practicarle una segunda operación en la pelvis.

“La operación a la que tienen que someterla es una operación sumamente fuerte y delicada, y el estado en que se encuentra ella ahora mismo, no la va resistir”, detalló.

“Yo tengo mucha fe (en que se va recuperar). La doctora nos lo dijo, que hay que pedirle mucho a Dios”, expresó sollozando.

Según reportes de la Policía Karla Nicole fue impactada a eso de la 1:35 p.m. del miércoles por una guagua escolar modelo International 3000, frente a la escuela José R. Barrera, en el barrio Unibón de Morovis.

La menor, quien se encontraba al lado derecho del autobús, fue arrollada por las gomas traseras, según la investigación preliminar. El vehículo era manejado por Wilfredo Salgado Morales, de 24 años y vecino de Morovis.

Martínez dijo desconocer cuán avanzada se encuentra la investigación sobre el accidente y señaló que aún la familia no ha tenido acercamientos con la Policía para propósitos de la pesquisa.

“Lo que ella ha dicho es que se bajó de la guagua, se dobló en la parte posterior de la guagua a amarrarse sus tenis y él da para atrás. Ella cae y ahí es que cuando él arranca y sucedió lo otro (la embistió)”, relató.

Asimismo, señaló que le han comunicado sobre las intenciones del chofer de reunirse con ellos. Según ha trascendido, Salgado Morales ha estado emocionalmente afectado tras el accidente.’

“Los comentarios que me han llegado es que él quiere acercarse a nosotros, pero nosotros honestamente, no estamos preparados para recibirlo. Yo sé que hay que perdonar, que Karla en todo momento lo dijo, que él no había tenido la culpa, pero lo que se ve fue una negligencia de su parte, por lo que vieron los testigos”, manifestó.

Las expresiones de Martínez se dieron tras visitar a su sobrina y en medio de una vigilia que se celebró en la rotonda del Hospital Pediátrico, en el Centro Médico de Río Piedras, donde más de un centenar de personas, en su mayoría, vecinos de Morovis y conocidos de la familia, se congregó para orar por la salud y la pronta recuperación de la joven. Mientras esto ocurría, el padre de la menor, Juan Carlos Rosario, se encontraba acompañando a su hija durante el turno de visitas.

Allí, los asistentes encendieron velas blancas y entonaron alabanzas también por la salud de todos los niños que se encuentran hospitalizados en la institución médica.

“Padre, mira a Karla Nicole, confiamos en ti, en que vas a hacer todo para que ella pueda ponerse de pie de nuevo. Padre, no te vemos, pero creemos, creemos que vas a levantar a esta joven de su condición”, oró Gloria González, pastora de visita de la Iglesia Presbiteriana de Avivamiento Bárbara Ann Roessler. Su esposo, también pastor, Manuel Ortiz, condujo la vigilia.

En la actividad estuvo presente, Carlos Negrón, padre de la también quinceañera Karla Michelle Negrón Vélez, quien falleció el pasado año, luego que en la despedida del 2011, una bala perdida la hiriera en la parte posterior de su cabeza. También asistió el teniente Gabriel Medal, quien desde que se retiró de la Policía, se ha dedicado, como Negrón, a llevar aliento y oración a quienes atraviesan por situaciones difíciles.