El Buró de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) tomó la custodia ayer de un individuo que fue arrestado tras ocurrir un tiroteo durante la noche del miércoles, frente a un negocio localizado en la avenida Pino, en Caguas, que dejó el saldo de dos heridos, entre ellos una adolescente.

El Negociado de la Policía reveló que el agente Israel Valle y el fiscal federal Richard Passanicci tendrán a cargo la pesquisa sobre las armas ocupadas y la custodia del sospechoso, que fue arrestado por las autoridades locales.

De la investigación inicial se desprende que a eso de las 9:15 p.m. el grupo compuesto por dos hombres de 23 y 45 años, dos adolescentes de 16 y 17 años, y una joven de 18 años, salió del negocio para abordar su vehículo marca Mercedes Benz, rojo, del 2015, pero una de las mujeres regresó para utilizar el baño.

Mientras la esperaban se les acercó una guagua oscura desde la cual varios individuos les dispararon, resultando herido de bala en el costado izquierdo Ignacio Sánchez Ortega, de 23 años, vecino del residencial Nemesio R. Canales, de Hato Rey y una menor de 17 años, recibió balazos en el costado y la mano izquierda.

Una adolescente de 16 años y otra la joven de 18 resultaron ilesas.

Los heridos fueron transportados al hospital Menonita en Caguas y quedaron recluidos en el Centro Médico en Río Piedras.

Según se desprende del informe de novedades, luego de tiroteo, Jason Cruz Fernández de 45 años, quien es vecino del residencial Villa Kennedy, detuvo a una conductora a quien le pidió que lo llevara al hospital. Antes de acercarse a la sala de emergencias lanzó dos pistolas hacia el área verde y al bajarse dejó otra pistola en el asiento del pasajero frontal.

Cruz Fernández fue arrestado por el guardia de seguridad del hospital y posteriormente por el agente Miguel Morales, de la División de Inteligencia, mientras recibía asistencia médica por los golpes que recibió en la cabeza y otras partes del cuerpo al lanzarse al pavimento cuando comenzó el tiroteo.

Como evidencia se ocupó una pistola Glock calibre 9 milímetros, cargada con 26 balas y un casquillo en la recámara en el vehículo de la ciudadana.

Además, encontraron en la maleza las otras dos pistolas Glock de calibre .40 y .45 cargadas, ambas con un casquillo en la recámara. Todas estaban alteradas para disparar como armas automáticas.

Al detenido se le ocupó un cargador calibre .40 con 17 municiones.

Mientras que en la escena se ocuparon como evidencia 83 casquillos calibre 9 milímetros y .40, blindajes, un cargador color negro tipo tambor con 29 balas del mismo calibre y varias prendas de vestir como camisas, gorra, entre otras pertenencias.

Durante el registro al vehículo Mercedes Benz, mediante una orden judicial, incautaron una onza de marihuana, una bala calibre 9 milímetros y un casquillo, una bala para rifle y $35 en efectivo.

La fiscal Daniliz Hernández ordenó su confiscación.

Las agresiones son investigadas por la agente Lisandra Aponte Rodríguez, adscrita a la División de Homicidios de Caguas. Todavía no se han arrestado a los gatilleros que abrieron fuego contra el grupo.

El detenido es investigado con relación a un asesinato ocurrido en febrero.