El décimosexto día de juicio contra Jensen Medina Cardona, señalado de asesinar en un confuso incidente por un celular a Arellys Mercado Ríos, en una marina de Fajardo, continuó hoy con el contrainterrogatorio a una amiga de la víctima que, aparentemente, presenció el momento del crimen y a la que se le instruyó a dibujar al acusado en la sala judicial.

Entre las gestiones realizadas en la sala 305 de la jueza Gema González, en el tribunal de Fajardo, el abogado Jorge Gordon Menéndez solicitó a la testigo Joanne Claudio Pérez que realizara un dibujo del hombre que identificó en sala como el asesino de su amiga y que, según afirmó en más de 27 ocasiones, es Medina Cardona.

“Yo no sé dibujar”, advirtió la testigo, quien sin más remedio se paró frente a un trípode y sobre un papel blanco dibujó, como pudo, las descripciones que había hecho del acusado.

Gordon daba instrucciones a Claudio Pérez para que trazara con un marcador la silueta, el cabello, la barba, la nariz perfilada, los pantalones y correa con los que describió bajo declaración jurada al presunto asesino de Arellys.

“Es que yo no sé dibujar”, insistió en al menos en tres ocasiones la testigo. Posteriormente, a petición del abogado de defensa, firmó el dibujo y le puso la fecha de hoy, 14 de junio de 2021.

Durante un receso este diario pudo ver el momento en el que una alguacil le entregó copia a los abogados de Jensen sobre el dibujo. La imagen mostraba un círculo como cabeza, dos puntos como ojos, una línea recta hacia abajo como nariz, entre otras características. De igual forma, el cuerpo lo formaba una línea vertical y los brazos y las piernas dos líneas horizontales. Con un marcador rojo se simuló la correa.

Los abogados aprovecharon el dibujo para comparar la firma de la testigo con otros documentos presentados en sala.

Posteriormente, Gordon Menéndez le preguntó a la mujer sobre el proceso de rueda de confrontración fotográfica que hicieron a casi 48 horas de ocurrido el asesinato, a la vez que cuestionó a la testigo si era cierto o no que horas antes había visto una imagen de Medina Cardona en la red social Facebook.

Claudio Pérez admitió que había visto la imagen, pero rechazó haber leído el calce que acompañaba a la foto y que señalaba a Medina Cardona como el asesino de Arellys. “No lo leí”, dijo la testigo que aseguró que tuvo una conversación sobre esa fotografía con los otros dos testigos presenciales del crimen (Luis Torres Gómez y Joseph Howe García), pero que no indagaron en el contenido del calce que acompañaba a la publicación que se hizo viral.

Gordon Menéndez aludió a que de las nueve fotos utilizadas en el “line up”, solo una (la número ocho) mostraba a un hombre de nariz perfilada y con poca barba, como habían descrito ella, Joseph y Luis a la persona que le disparó a Arellys en el cuello. La fotografía número ocho fue la circulada por los tres testigos en la rueda de confrontación.

Llega a sala el duodécimo testigo del caso

A media mañana el juicio continuó con el interrogatorio por parte del fiscal Jaime Perea al marino mercante Gabriel Árevalo De Castro. Este fue el testigo que la semana pasada no llegó al tribunal por “razones de trabajo”. Se supone que hoy el testigo mostrara al tribunal las razones de su incomparecencia. Ese proceso no ha sido discutido en sala.

Lo que sí trascendió en el tribunal fue que Árevalo De Castro estaba la noche del asesinato compartiendo con unas amistades en el negocio The Point, ubicado en Villa Marina Boulevard, de Fajardo, cuando recibió una llamada de su mamá indicándole que tuviera cuidado porque había visto a un hombre en el área con un arma. Inmediatamente después, alega, se escuchó una detonación.

El hombre relató que se montó en un carrito de golf de un amigo y se dirigió a la caseta del guardia porque quería asegurarse de que su mamá estuviera bien. Tras percatarse de que su progenitora estaba en buen estado, Árevalo De Castro alega que vio una Dodge RAM 1500 negra. Aludió a que el vehículo le llamó la atención por la forma en que su conductor manejaba a toda prisa.

El testigo explicó que se bajó del carro de golf y se dirigió a la guagua negra. Agregó que le hizo señal al conductor con su mano para detenerlo. El conductor se detuvo, baja el cristal y ambos se miran. Árevalo Castro dijo que observó una mujer en la guagua, pero “no la pude ver bien”.

Todo lo narrado por Árevalo De Castro se pudo comprobar en tiempo y espacio a través de unos vídeos presentados en sala y que fueron grabados a través de las cámaras de seguridad de Villa Marina Boulevard.

A preguntas del fiscal, el hombre alegó que al acercarse notó al conductor de la guagua Dodge RAM nervioso y prefirió alejarse. Explicó que se alejó “para no buscarme un tiro”. Afirmó que en ese instante la guagua se fue de la marina, pero que pudo anotar tres números de la tablilla y se lo informó al guardia de seguridad del lugar.

Al menos en dos ocasiones, el testigo identificó en sala a Medina Cardona como el conductor que iba a bordo de la Dodge RAM negra. Árevalo De Castro es la quinta persona que identifica al acusado en la sala del tribunal.

En la tarde el proceso continuó con el contrainterrogatorio al testigo por parte del abogado Orlando Cameron Gordon, quien trató de presentar en sala incongruencias entre lo que se trascendió en sala versus lo que se expuso bajo declaración jurada.

Por ejemplo, el testigo aceptó que no dio descripciones físicas específicas sobre la persona que vio en la guagua pues se limitó a describirlo de una manera general.

El juicio se supone que continuara con el interrogatorio al empleado del Sistema del Manejo de Emergencias 9-1-1, Elmer Torres Rosario. En cambio, el fiscal Yamil Juarbe dijo que por “tratarse de prueba acumulativa” el Ministerio Público decidió no utilizar el testimonio como parte de su prueba.

“Ponemos al testigo a disposición de la defensa”, agregó Juarbe.

Los abogados del acusado aprovecharon para entrevistar hoy al testigo, de quien no se tenía declaración jurada. Expresaron que tomarían luego la decisión de utilizar o no al empleado del Sistema de Emergencias como testigo y así lo informarían al tribunal.

Asimismo, el licenciado Gordon adelantó que recurrirá al Tribunal Supremo para presentar un recurso de “certiorari” solicitando que no se admita como pruba una orden de compra sometida por Medina Cardona por un vehículo Dodge RAM el 3 de julio de 2019 en el concesionario Benítez Auto Group, en Humacao.

El documento de 15 páginas se convirtió en el eje de controversia del juicio que se sigue en contra de Medina Cardona, pues la jueza González determinó no admitirlo ante las objeciones de los abogados de defensa.

En cambio, el Tribunal de Apelaciones declaró la semana pasada “ha lugar” el recurso de “certiorari” del Ministerio Público solicitando la admisbilidad del documento.

Precisamente, mañana, martes, está previsto a sentarse a testificar el gerente de ventas y finanzas del concesionario, Rafael Bernal Martínez. El hombre sería el testigo número 13 presentado en sala por parte de la Fiscalía.

Los hechos de este caso se remontan al 18 de agosto de 2019 cuando tras un confuso incidente por un celular, Arellys recibió un disparo mortal en el cuello.