Juander Santos Aquino es un atleta dominicano que se especializa en los 400 metros con obstáculos, y 400 metros. 

Es conocido en Puerto Rico por haber sido estudiante y atleta de la Universidad Central de Bayamón. Nació en Bayaguana, Monte Plata, en República Dominicana y es el hermano menor del mundialista y medallista Olímpico y Panamericano Luguelín Santos. 

Juander ha ganado varias medallas internacionales en el evento de 400 metros con vallas y el relevo 4 X 100, incluyendo en los pasados Centroamericanos. 

Este joven de 24 años dio ejemplo de dignidad deportiva en estos Panamericanos cuando dominaba los 400 con vallas y tropezó casi al final de la carrera perdiendo mínimo una medalla de plata. 

Juander quedó en la pista llorando desconsoladamente y de pronto se levantó y caminó erguido hasta la meta en una demostración de vergüenza, coraje, orgullo y dignidad deportiva. 

Esa será una de las grandes imágenes de estos juegos en Lima, Perú.

Melanie Díaz González es la hermana mayor de la consentida de nuestra delegación, Adriana, y junto a Danielys Ríos forman nuestro equipo femenino de tenis de mesa.

Melanie ha vivido en medio de la fama del fenómeno Adriana Díaz algo que, para bien o para mal, ha llevado con orgullo.

Pero Melanie no se conformaba. Aunque entró clasificada mundialmente en la posición 88 previo a estos juegos, la atleta de 24 años veía cómo pese a su dedicación se le escapaban grandes momentos en su gran deseo de dejar su propia huella en la historia deportiva de Puerto Rico. 

Es de todos conocidos su entrega al deporte, su dieta estricta, su disciplina férrea y su espíritu competitivo de “águila de la montaña” que poseía el utuadeño Peco González.

Todo cambio el pasado miércoles cuando Melanie se creció y, tras perder el partido individual que la hubiera llevado a pelear por el oro, dio una demostración de coraje ganando la medalla de bronce.

Su grito de victoria retumbó en todo Lima ya que por fin llegó la codiciada presea.

Pero el libreto “Divino” le guardaba una recompensa mayor a la boricua. Cuando Puerto Rico perdía en equipo femenino ante Brasil, y tras una derrota de su hermana Adriana, las nuestras vinieron de atrás para forzar un quinto juego decisivo. 

Ese le tocó a Melanie, quien -perdiendo dos juegos a cero ante Bruna Takahashi- ganó puntos consecutivos de forma magistral ante la mirada atónita de su rival y la celebración de sus compañeras de equipo. 

Melanie fue dura con la brasileña que había derrotado a Adriana y le arrebató el oro de forma impresionante. Esta vez no hubo llanto de tristeza. Melanie escribió su historia con un sello de perseverancia y persistencia. 

Reconocemos el extraordinario desempeño de Daniely Ríos, que tiene muy claro su rol en este equipo. 

Juander y Melanie son dos momentos contradictorios en la historia deportiva. Pero ambos son un ejemplo del deportista que, con su talento, representa con orgullo a su gente, su familia, su bandera y su patria. 

A todos nuestros atletas: gracias por unos Panamericanos inolvidables cuando el país más lo necesitaba.

Sí... dije ¡El País!