En mi opinión, lo que pasó ayer fue un “Come to Jesus Moment”. Voy a explicar qué es eso ya mismo. 

El gobernador ha alegado no haber sido parte ni haber sabido de los actos de corrupción que han ocurrido bajo sus narices. Sin embargo, las cosas que han ocurrido son el resultado de una estructura que él personalmente creó que permite y fomenta las áreas grises que culminan típicamente en corrupción legal o ilegal. 

Le voy a dar varios ejemplos: 

1 – Elías Sánchez – Los gobernadores típicamente nombran como jefe de la transición a alguien que va a tener a cargo luego la secretaría de Estado o la gobernación. Rosselló rompió con eso y nombró a Elías Sánchez como jefe de la transición donde se enteró de todos los contratos, compras, seguros, transacciones por hacer, tecnología por comprar, todo, todo, todo, lo confidencial y privilegiado. Elías tuvo acceso a la mina de oro. Luego fue nombrado a la Junta de Control fiscal como delegado del gobernador teniendo aún más accesos a los bufetes de abogados, consultores, amigos, trabajos que tendrían que hacerse en el futuro y contratistas que harían falta, etc. Unos cuantos meses después de haber logrado tener acceso a los secretos más codiciados del gobierno y de la Junta, renunció y se convirtió en cabildero. O sea, ahora llamaría a los jefes de agencia para empujarle sus intereses y contratos para sus clientes. 

2 – Alberto Velázquez Piñol – Volvamos al punto de la estructura que permite. Piñol no tenía ningún puesto público ni era contratista directamente del gobierno. Sin embargo, tenía acceso total a los jefes de los dos presupuestos más grandes de todo el gobierno, le envían todas las comunicaciones confidenciales y estaba en todas las reuniones donde se repartía el cash del gobierno. Luego, la empresa que contrataba a este, BDO, se pegó en la Loto y de ser la quinta empresa de contabilidad de la Isla repentinamente en un año se convirtió en la empresa más grande de contabilidad de Puerto Rico. ¿Casualidad? 

3 - Ambas personas, sin posición oficial en el gobierno, se pasearon por el COE después del huracán junto a otros cabilderos como Manny Ortiz. Allí empujaban sus intereses con el resto del país en ruinas. Mientras PR estaba devastado, el gobernador permitió y fomentó que a los cabilderos que empujaban sus intereses se les diera acceso total al centro donde estaban los jefes de agencia bregando con la emergencia que vivía la Isla, pero particularmente, donde en momentos de emergencia no hay que publicar ni competir por los contratos, sino que todo es allí la carta. El gobernador no solo permitió esto, sino que lo fomentó dejando que hasta ID’s de entrada total tuvieran estos sujetos sin tener ningún rol oficial en el gobierno. 

Por tanto, yo no me puedo comer el cuento de que el gobernador no sabía, porque cuando se denunció lo mismo de Velázquez Piñol en Hacienda bajo Raúl Maldonado le dio más autoridad. Hace siete meses se le dijo al gobernador, por el CIO de Hacienda, que había un traqueteo igualito donde se nombraron asesores para luego coger ellos mismos los contratos y subcontratar al hijo del secretario. En mi programa enseñamos los emails y la información. El secretario admitió que visitaba agencias de gobierno con su hijo donde este tenía contratos. El gobernador le dio más poder a Maldonado. Igual en mi programa sacamos las denuncias de que en Salud se le estaban dando contratos innecesarios por millones a una firma cabildeada por Elías. Los que denunciaron esto terminaron fuera, como Dolly Parrilla en Educación, Jesús Severino y Grendaliz Vélez del Centro del Cáncer, el CIO de Hacienda y otros más.

Hay algo que los federales usan mucho. Le dicen “Come to Jesus Moment” cuando arrestan a alguien y le hacen saber que, o cooperan y tiran al medio a otros o van para dentro. Si lees las acusaciones, la evidencia presentada es más mirar a Jesús y decidir si vale la pena cogerse unos añitos o aliarse con el bando de la Justicia. Come to Jesus Keleher… talk Angie, these people are not worth it.