El Departamento de la Vivienda lanzó un nuevo programa, disponible desde el 31 de julio, para ayudar a personas y familias cuyas viviendas fueron afectadas total o parcialmente por los huracanes Irma y María.

El Programa de Reparación, Reconstrucción o Reubicación, o R3, utilizará parte de los miles de millones de dólares asignados por el Congreso a través de los programas de CDBG-DR para la reconstrucción de la Isla.

Según explicaron el secretario de Vivienda, Fernando Gil, y el ayudante ejecutivo de fondos CDBG-DR, Christian Pagán, las personas podrán acceder a R3 para solicitar asistencia e inscribir su solicitud acudiendo directamente a uno de los centros del programa, solicitando en línea a través del portal www.cdbg-dr.pr.gov, llamando al centro de llamadas al 1-833-234-2324, o descargando la aplicación móvil CDBG-DR.

La aplicación móvil al momento solo está disponible para teléfonos con sistema Android, pero esperan tenerla disponible para Apple en la próxima semana.

Los centros estarán ubicados en Aguadilla (Plaza del Mar, segundo nivel), Bayamón (carretera 167, frente a escuela José Antonio Dávila), Carolina (Plaza Carolina Shopping Center, segundo nivel), Ponce (Ponce Servicios, antigua Plaza del Mercado), así como otros dos centros satélites en Orocovis (Escuela Intermedia Urbana) y Guayama (estacionamiento municipal San Cristóbal).

El centro de llamadas estará disponible de lunes a sábado de 8:00 a.m. a 8:00 p.m., y no se limitará al Programa R3, sino que ayudará a las personas también con otros programas de CDBG-DR.

Según detalló Gil, el programa cuenta con $775 millones disponibles en su primera fase. Y en una siguiente fase contaría con otros $1,100 millones.

El programa será manejado por cuatro compañías que participaron en el proceso de subasta, con ayuda de los municipios, de los cuales 48 ya han establecido acuerdos de colaboración con Vivienda específicos para estos fines.

Aunque el programa atenderá a todos los que cualifiquen, los casos que recibirán prioridad durante los primeros 90 días del programa serán los de personas discapacitadas, las personas de 65 años o más, y las personas cuya propiedad tenga daños significativos, incluyendo techos con toldos azules.

“Es un programa pensado y basado en planificación y en análisis de la necesidad que nuestro pueblo tiene”, afirmó Pagán. “El objetivo primario es proveer viviendas dignas, seguras e higiénicas a las personas afectadas por los huracanes Irma y María”.

Para cualificar, alertó Pagán, las personas tienen que estar consideradas como de ingresos bajos o moderados. Para saber dónde se encuentra una persona en términos de sus ingresos, se puede buscar la guía al respecto en la página oficial de Vivienda.

Los solicitantes deberán presentar título de propiedad, aunque habrá también flexibilidad para aceptar otros documentos tradicionales y no tradicionales, como declaraciones juradas que avalen que son propietarios de la vivienda.

Además, la propiedad debe cumplir con los criterios establecidos; el solicitante tiene que ser dueño de la propiedad y tenía que haber estado ocupando la propiedad al momento del huracán.

De cualificar, se otorgará hasta $60,000 para reparación, y hasta $150,000 para reconstrucción o reubicación. Para que se acepte la reconstrucción, la vivienda no podrá estar en una zona inundable o propensa a deslizamientos.

No obstante, Gil fue enfático en que con este programa no se entregará dinero a ninguna persona, sino que se rembolsará, una vez se completen los trabajos y se inspeccionen para certificar que cumplieron con lo acordado.

Cabe destacar además que las personas cuyas reclamaciones no fueron aceptadas por FEMA no están impedidas de solicitar ayuda bajo este programa.