Antonio Cuevas, de 36 años, viajó al Cusco, Perú, el pasado 10 de junio con el fin de participar de un retiro espiritual. Sin embargo, a los pocos días de haber llegado, el boricua -nacido en Hato Rey y radicado en Nueva Jersey- comenzó a sentirse mal.

Entonces, llegó hasta la sala de emergencias de la Clínica Peruana Suiza de Cusco porque tenía náuseas y mareos, pero estando en el hospital su condición se agravó con episodios de vómitos, convulsiones y hasta un paro respiratorio que lo llevó a ser entubado y a un estado de coma.

“Antonio fue a una misión espiritual. Había llamado a mi hermana y le había dicho que se sentía un poco mal. Tenía náuseas y mareos. Luego la llamaron del hospital para decirle que le dio un paro respiratorio, convulsiones y que se fue en coma”, explicó Marilia Muñiz, tía y madrina del afectado.

Ya hoy viernes son 11 días que Antonio lleva en coma y, según su tía, tiene un edema cerebral y no responde a los tratamientos. La madre y una prima del joven pudieron viajar hasta el hospital, pero se les complica la situación cada día que pasa, ya que Cuevas no cuenta con seguro médico porque se había quedado desempleado y la familia no tiene los recursos para pagar la costosa hospitalización que ya sobrepasa los $30 mil dólares.

A su vez, la embajada de Estados Unidos no puede proveerle ayuda a la familia, ya que alegan que el caso de Antonio no cualifica por no tratarse de un accidente, sino de una enfermedad. Mientras tanto, el tiempo sigue corriendo peligrosamente para este padre boricua de dos niños, una de 15 y otro de 10, y el hospital continúa facturando miles de dólares por su servicio.

“Ese hospital es privado y la embajada no puede dar ningún tipo de ayuda económica porque su caso no aplica para ayudas. El hospital no tiene ayuda financiera alguna y cada dos días hay que estar depositando dinero. Ya van como por $30 mil dolares. Mi hermana tiene la suerte de que una familia peruana la acogió con hospedaje, pero no le han dicho el tiempo que se puede quedar allí y mi sobrino sigue en coma”, sostuvo preocupada la tía.

La primera opción para la familia sería poder trasladar a Antonio en ambulancia aérea de Perú hasta Nueva Jersey para poder estar con él en este proceso, pero el costo del servicio es inalcanzable para ellos. Y, a pesar de que ayer, jueves, por medio de una donación hicieron un intento por transportarlo a un hospital en Lima, Perú, el intento resultó infructuoso.

“Llevarlo a Estados Unidos en ambulancia aérea son casi $90 mil dólares, dependiendo de la condición (del paciente). Pero, el hospital de Cusco ya no cuenta con los recursos para atender su condición, por lo que ayer estaba siendo trasladado a la Clínica Angloaméricana en Lima, Perú (a menos de una hora) a través de una donación que le hicieran de ambulancia aérea. Sin embargo, el traslado fracasó porque aparentemente la ambulancia aérea no estaba cualificada y la condición de Antonio se ha agravado”, lamentó Muñiz.

La tía, en su desespero, ha intentado contactar por correo electrónico a varios senadores de Nueva Jersey, pero no ha tenido suerte y cada día que pasa el círculo se sigue cerrando.

“Todo el mundo está desesperado. Mi hermana (madre de Antonio) tiene a su papá bien enfermo. Y el hijo menor de Antonio es autista. Ha sido bien difícil la situación para toda la familia. Mi sobrina se tiene que ir de Perú y mi hermana no se puede quedar sola porque no sabemos hasta cuándo la persona que le está dando alojo le ayudará”, explicó la también madrina del hombre, quien solicita la ayuda de los puertorriqueños ante este inesperado suceso.

Quien desee ayudar a Antonio para costear sus gastos médicos y que pueda ser trasladado al territorio norteamericano, puede hacerlo a través de GoFundMe (gofundme.com/f/help-for-tony-and-the-family), por PayPal en Sheila.cuevasGmail.com y también por las aplicaciones Cash App $sheilashu y Venmo $Michelle-Cuevas.