Pa’ muestra con un botón basta.

Los cientos de ciudadanos que participaron ayer en la feria de empleo convocada por el Gobierno, y que fueron entrevistados por una treintena de patronos con ofertas en diversas áreas de la construcción, evidencia el alto número de desempleo en la Isla.

Pero el éxito fue tal que se adelantó que llevarán ferias a otras regiones para llegar a más personas.

La encuesta más reciente publicada por el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos (DTRH), reveló que para diciembre de 2018, había 990,000 personas trabajando, lo que representa unos 15,000 trabajadores más al compararlo con las 975,000 personas empleadas en el mismo mes del 2017 y 8,000 menos que en noviembre de 2018.

La feria de empleo de ayer fue una colaboración entre la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT), el DTRH, la Oficina Central de Recuperación y Reconstrucción (COR3 en inglés), el Departamento de Desarrollo Económico (DDEC) y la Asociación de Contratistas Generales de América (AGC-PR).

Una de las cientos de personas que llegó hasta Río Piedras, desde Naranjito, fue la abogada y bióloga Jeannette Beauchamp, de  29 años, quien laboró hasta enero pasado con la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) y llegó a la feria “a ver si hay una oportunidad”.

Aceptó que, aunque hay oportunidades de empleo para carpinteros, plomeros o contructores, “también necesitan gente de administración, que hagan análisis, auditorías y recursos humanos”. 

En su caso, cuando vieron su resumé, la entrevistaron de la empresa Aireko Management Services, LLC donde “hay unas vacantes que problablemente sea elegible para ellas”. 

Otra que trabajó en FEMA, con la empresa Rising Phoenix, fue Wanda Vázquez Rivera, residente en  Caguas.

“Empecé con ellos en octubre de 2017 y trabajo en lo que sea”, dijo Vázquez Rivera.

Aceptó que con la experiencia en la agencia federal  “me di cuenta que me gusta mucho el trabajo” (de construcción).

Wanda,  de 55 años, tiene una maestría en Administración y otra en Teología.

En el caso de Alex Correa, de 30 años y residente en  Humacao, luego de la entrevista, quedaron en avisarle sobre una posible plaza.

“Salí (de mi casa) a las 4:00 a.m.”, dijo  Correa, quien llegó con resumé en mano y con  experiencia en carpintería.

Ayer le dieron la oportunidad de seleccionar en un documento en cuáles  otras tareas podría desempeñarse.

Don Georgino Mulero Silva, de 75 años, era otro de los que hacía fila pacientemente.

El residente en Toa Baja y retirado del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), dijo que tiene experiencia en maquinaria pesada. 

Sin embargo, fue uno de los que se quejó de que la feria se haya celebrado en San Juan cuando otros interesados, seguramente no llegaron por quedarle lejos.

Hay que mencionar que a la 1:00 a.m. llegó una vecina desde Ponce y que otros estaban allí desde las 3:00 a.m., incluyendo gente de Adjuntas, se informó.

“Esto lo pudieron haber hecho regional, así le dan oportunidad a los contratistas de todo Puerto Rico. Mira que revolú de gente”, mencionó.

Entre los entrevistados había un denominador común: todos trabajarían en lo que sea.

Este fue el caso de Gilbert Rodríguez Rodríguez, de 21 años, de Humacao, y Edwin Nieves Velázquez, de 20 años, de Las Piedras.

Rodríguez Rodríguez, quien  tiene experiencia con FEMA, está de visita en la Isla porque lleva seis meses en Estados Unidos trabajando en una fábrica de piezas de vehículos de motor.

Dijo que está dispuesto a quedarse aquí, cerca de su familia, si consigue el empleo.

Nieves Velázquez, quien estudió mecánica automotriz y hojalatería y pintura, dijo que trabajaría “en cualquier cosa” que le ofrezcan los patronos.

En la feria también estuvo un grupo de empleados que estaba en probatoria y fue cesanteado este mes de la megacadena estadounidense Sam's.

Iván Báez, director de asuntos públicos y relaciones gubernamentales de la cadena Walmart, dijo que la cifra final de despidos fue de 200 probatorios y 70 regulares.

 Sin embargo, mencionó que con la reorganización, Sam's aumentó su plantilla de trabajo a tiempo completo de 34% a 41%.

Alexandra Andino Álvarez, de Toa Alta,  fue una de las cesanteadas, tras comenzar a trabajar en la tienda Sam’s en el centro comercial Plaza Escorial en Carolina, en octubre pasado, donde  “llevaba seis meses exacto”.

Sobre el proceso ayer, donde fue atendida primeramente por peritos del DTRH,  dijo que fue bueno y esperaba por ser entrevistada por alguno de los  patronos.

 Además de su experiencia como cajera y secretaria, Álvarez tiene estudios en facturación de planes médicos.

Sorprendidos con la participación

Tanto el presidente de la AGC-PR, el ingeniero Alejandro J. Abrams, como el secretario del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), Carlos Contreras, se mostraron sorprendidos con la participación.

“Ciertamente estoy impresionado, uno tiene unas expectativas; sabemos que teníamos mucha necesidad de empleado y lo que estamos viendo es que la mano de obra de Puerto Rico está disponible y es que no sabía dónde ir”, dijo Contreras.

Aceptó que aunque la prioridad de su agencia es la de las carreteras y puentes también hay necesidad de empleos para la parte de viviendas y  otras industrias.

Dijo que el resultado de la feria “nos va a obligar a tener que hacer otra”.

Mientras, el ingeniero Abrams reconoció que no esperaba esta participación a esta magnitud, y tal como pasó, dijo que todos serían atendidos, aún después de las 3:00 de la tarde, que era la hora de cierre.

La información recopilada ayer va a un banco de datos donde la compartirán los 300 miembros de la AGC-PR para realizar entrevistas de empleo.

El pasado 30 de julio, el gobernador Ricardo Rosselló firmó una orden ejecutiva para aumentar el salario mínimo a $15 la hora para los empleados de la industria de la construcción aquí que sean reclutados para   contrataciones gubernamentales.

Sin embargo, Abrams indicó que no todos los empleos caen bajo esta orden.

Al presente, hay unos 40,000 empleados en la industria de la construcción, pero el Gobierno estima que necesitará muchas más personas para los cientos de proyectos de construcción y reconstrucción que espera se desarrollen en los próximos años.

La cifra podría alcanzar las 100,000 personas laborando en proyectos de construcción.