El secretario de Salud, Dr. Rafael Rodríguez Mercado firmó hoy, lunes,  la orden administrativa 402 que permitirá que las farmacias en Puerto Rico vendan sin receta y solo a los adultos el medicamento “Naloxona”, el cual se ha desarrollado para atender casos de emergencias de sobredosis de opiáceos.

Uno de los problemas de salud que ha venido afectando a miles de personas en años recientes, tanto en Estados Unidos como en Puerto Rico, es la adicción a los opiáceos, según declaraciones escritas.

Este medicamento bloquea o invierte los efectos de otras pastillas, incluyendo la somnolencia severa, la respiración lenta, o la pérdida de la conciencia.

 “Como parte de la política pública del Gobernador Ricardo Rosselló de implementar medidas de salud pública dirigidas a propiciar y conserva la salud de todos, estoy autorizando el despacho y venta sin receta en la jurisdicción de Puerto Rico del medicamento conocido como Naloxona, en sus versiones intranasal y autoinyectable. La disponibilidad de este medicamento no implica un riesgo mayor a la ciudadanía, sino que es una herramienta capaz de salvar vidas en casos de personas que sufren los efectos de una sobredosis de opiáceos", explicó el Secretario de Salud.

Además, añadió que "la tolerancia al efecto eufórico de los opiáceos se desarrolla más rápido que la tolerancia a sus efectos peligrosos. Muchos adictos a opiáceos toman sobredosis por error, al tratar de obtener una sensación extendida o más intensa de euforia”.

Además, hizo hincapié en que las farmacias que vendan dicho medicamento al consumidor, llevarán un registro confidencial de los despachos del medicamento y vendrá obligada a así informarlo a la División de Farmacias de la Secretaria Auxiliar para la Reglamentación y Acreditación de Facilidades de Salud (SARAFS) que mantendrá dicho registro disponible al público en general.

 Al momento de comprar el medicamento “Naloxona”, conocido también como “Narcan” o “Evzio”, será necesario que se presente una identificación. Los proveedores de servicios de primera ayuda (first responders) como  policías, paramédicos, bomberos y auxiliar de paramédicos, podrán mantener el medicamento Naloxona disponible en cualquier ambulancia o vehículo oficial registrado en la Comisión de Servicio Público siempre y cuando estén adiestrado en el uso del medicamento.

Los opiáceos son un tipo de medicamento utilizado principalmente para el manejo del dolor. Incluyen fuertes analgésicos recetados, como oxicodona, hidrocodona, fentanilo y tramadol. La droga ilegal llamada heroína es también un opiáceo y algunos se producen a partir de la planta del opio y otros son sintéticos, es decir manufacturados por humanos.

 A muchas personas a quienes se les ha recetado este tipo de medicamento continúan tomándolos luego de terminado su tratamiento, a pesar de no tener razón médica para hacerlo. Con esta conducta, los pacientes buscan evitar el síndrome de abstinencia a opiáceos, o quieren seguir experimentando los efectos eufóricos de la droga.

De esta manera, una persona tiene adicción a los opiáceos cuando desarrolla una dependencia de estos medicamentos.

Cada día, más de 90 estadounidenses mueren por sobredosis de opiáceos. El abuso y la adicción a los opiáceos, incluidos los analgésicos recetados, la heroína y los opiáceos sintéticos como el fentanilo, constituyen una crisis nacional grave que afecta tanto la salud pública como el bienestar económico.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) estiman que en ese país la carga económica total derivada del abuso de opiáceos recetados solamente es de $78,500 millones por año, esto incluye los costos de atención médica, la pérdida de productividad, el tratamiento de la adicción y los costos de intervención del sistema de justicia penal.