El tribunal ordenó la paralización de trabajos de tala de árboles en el balneario de Cerro Gordo, en Vega Alta, luego de la celebración de una vista judicial en torno a la demanda presentada en contra del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) y el Departamento de Recreación y Deportes (DRD) por lo que ha sido descrito como una “masacre ambiental”.

En la zona de Cerro Gordo fueron cortados cientos de árboles y palmeras por una compañía bajo contrato con el DRNA, alegando que se trataba de árboles enfermos. Sin embargo, vecinos de comunidades cercanas al lugar, así como personas que usan las instalaciones deportivas y recreativas del área, denunciaron que se trataba de una tala indiscriminada. Eventualmente, el municipio de Vega Alta, comunidades y usuarios del balneario de Cerro Gordo radicaron una demanda en los tribunales para exigir la paralización de los trabajos.

El gobierno intentó, sin éxito, que se desestimara la demanda. Y hoy se dio una primera vista del caso, ante la jueza Sarah Y. Rosado Morales, en la que trascendió además que el DRNA no cumplió con la entrega a los demandantes de documentos que alega justifican la tala, que le había ordenado la corte días atrás y que le reiteró durante la vista de la semana pasada para atender su solicitud de desestimación.

Mañana viernes está pauta una vista presencial en el balneario de Cerro Gordo, como parte del proceso judicial.

El abogado Pedro Ortiz Álvarez, quien lleva el caso a nombre los demandantes, se expresó “complacido” con lo ocurrido en la vista, “dentro de las circunstancias lamentables que rodean este caso”.

“En primer lugar se han paralizado todas las gestiones, todas las cosas terribles que estaban pasando en Cerro Gordo. Y no va a ocurrir nada allí hasta que, o se llegue a un acuerdo con el municipio con respecto a alguna situación que requiera atención urgente, o con la intervención del tribunal. Pero el destrozo inescrupuloso de árboles que estaba ocurriendo allí, pues se detuvo”, afirmó Ortiz.

El abogado agregó que continuarán dando la batalla para que “una situación como esa no siga afectando a los residentes de Vega Alta y a los usuarios de esas áreas, que son de todo Puerto Rico”.

Ortiz sostuvo que mañana (viernes) habría “una reunión en el área, con el propósito de levantar las barreras” para que el público pueda tener acceso a la zona. Agregó que “el estado tiene una orden ya final, de que nos tienen que someter todos los documentos que, supuestamente, justifican las intervenciones del estado”.

“Por lo que ocurrió en la vista ante la Cámara de Representantes, estamos plenamente convencidos de que allí el Departamento (de Recursos Naturales y Ambientales) se excedió en lo que podía hacer. De la misma manera que no tenemos la menor duda de que el procedimiento seguido fue ilegal, porque incluyó la eliminación de la intervención del Departamento de Recursos Naturales (y Ambientales) como ente regulador y como agencia con la función de proteger los recursos naturales en Puerto Rico”, afirmó Ortiz.

Sostuvo que el DRNA “lo que hizo fue, simplemente, excusar el cumplimiento de los reglamentos y sustituirlo por una indagación un tanto subrepticia, anónima, que se conducía por una gente, sin la participación del municipio, de la comunidad y del pueblo en general, que es lo que debe ocurrir en situaciones como esta”.

Linda Marrero, quien se describió como “usuaria del área recreacional de Cerro Gordo”, celebró la paralización de la tala ordenada por la corte.

“Hemos logrado que hayan dejado de hacer daño a nuestro parque. Y estamos contentos, porque al fin hay una comunidad que se preocupa, y al fin tenemos un alcalde que lucha por sus recursos naturales”, dijo Marrero.

Mike Arroyo, vecino y pastor de la comunidad de Breñas, cercana a Cerro Gordo, también se expresó “complacido con lo que está pasando”.

Alabó la celebración de la vista presencial de mañana viernes, y anticipó que con la misma podrían “remover aquel rótulo que está prohibiendo ahora mismo el acceso al parque, y también llegar a una conclusión de que cese y desista el hecho de que sigan tumbando árboles en el área de Cerro Gordo. Así que esperamos en Dios que esto termine y que todos quedemos complacidos”.