El sobrepeso y la obesidad son condiciones médicas en incremento. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) determinaron que, para el año 2017-2018, la prevalencia de obesidad en los Estados Unidos era de un 42.4%, siendo la población hispana la segunda más afectada.

La doctora Nadyeschka A. Rivera Santana es endocrinóloga del Departamento de Endocrinología Hospital Municipal de San Juan.
La doctora Nadyeschka A. Rivera Santana es endocrinóloga del Departamento de Endocrinología Hospital Municipal de San Juan. (Suministrada)

Los CDC precisaron que, para el año 2020, el 31.4% de la población puertorriqueña mayor de 18 años padecía de obesidad.

El sobrepeso es definido como un índice de masa corporal (IMC) igual o superior a 25 kg/m2, mientras que la obesidad es un IMC superior a 30 kg/m2. Esta es subdividida en obesidad severa, cuando el IMC sobrepasa los 40 kg/m2 o es mayor o igual a 35 kg/m2 en la presencia de comorbilidades tales como: diabetes mellitus, hipertensión, osteoartritis y apnea del sueño, entre otras.

Existen varias causas que pueden provocar el padecimiento de estas condiciones médicas, aunque el sedentarismo y el aumento en la ingesta calórica son las más comunes.

Es importante visitar al profesional de la salud para poder excluir causas secundarias como condiciones genéticas, trastornos alimenticios, efectos de medicamentos o endocrinopatías tales como la enfermedad de Cushing. Aunque es frecuente escuchar que el hipotiroidismo causa obesidad, es importante reconocer que el aumento en peso provocado por el hipotiroidismo no tratado es entre 5 a 10 libras y esto se debe a la retención de sodio y agua.

Padecer de sobrepeso u obesidad está asociado a un gran espectro de complicaciones médicas. Entre las complicaciones metabólicas se encuentran la diabetes mellitus y la dislipidemia con un aumento en los triglicéridos y LDL, lo que se conoce como el colesterol malo y disminución en HDL, lo que se conoce como el colesterol bueno. Las complicaciones cardiovasculares asociadas al sobrepeso y obesidad incluyen: la elevación de la presión sanguínea, la enfermedad coronaria, y los eventos tromboembólicos y cerebrovasculares. También se ven afectados otros sistemas como el musculoesquelético, el respiratorio, el gastrointestinal, el reproductivo y el genitourinario. Debido a la morbilidad y la mortalidad asociada al exceso de peso, es de suma importancia recibir una evaluación médica para su pronto tratamiento.

Como parte del tratamiento inicial se recomienda la modificación en estilos de vida. Esto incluye una dieta balanceada, personalizada al gusto del paciente, y de aproximadamente 1,200 a 1,500 kcal/día para las mujeres y de 1,500 a 1,800 kcal/día para los hombres. Con respecto al ejercicio, se recomiendan, al menos, 150 minutos semanales de entrenamiento aeróbico y de resistencia. Como parte del tratamiento para la obesidad, contamos con seis medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) para aquellos pacientes que cumplan los requisitos, al igual que con la cirugía metabólica.

Una pérdida de 5 a 7% de peso corporal está asociado con disminución en factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas.

Si tú o algún familiar padece de sobrepeso u obesidad, se recomienda que sean evaluados por su médico primario o endocrinólogo para así poder utilizar las herramientas necesarias para ayudarles a alcanzar una vida saludable.

La autora es endocrinóloga en entrenamiento del Departamento de Endocrinología Hospital Municipal de San Juan.