Lejos de continuar con la batalla para que el Gobierno Municipal de Ponce atienda el Centro Ceremonial Indígena de Tibes, la comunidad aledaña está dispuesta a adoptar las operaciones de este parque que alberga uno de los yacimientos arqueológicos más importantes del Caribe.

La escasez de empleados y recursos asignados al reconocido centro turístico cultural, ha ocasionado el descuido de veredas, plazas y salas.

De acuerdo al líder comunitario Ernie Rivera Collazo, “los problemas son desde años antes del huracán (María) y estoy en récord con eso, porque llevo años peleando por la dejadez en que lo tienen. Había problemas con las colecciones arqueológicas, aunque en este verano el arqueólogo Antonio Curet consiguió unos fondos y se comenzó a trabajar con la colección arqueológica”.

Rivera Collazo aseguró que otra de las situaciones que enfrenta el yacimiento arqueológico más antiguo de Puerto Rico, es la ausencia de guías interpretativos que reciban a los visitantes locales y extranjeros. Esto se comprueba a través de distintas visitas en las que se observa a grupos de turistas recorriendo el área sin ninguna atención.

“Aquí hace falta personal de mantenimiento porque más allá de los guías, se necesita personal para trabajar en las áreas verdes, en la parte arqueológica y muchas veces tampoco había materiales para el baño. En un momento dado hubo hasta una plaga de pulgas que afectó hasta los propios empleados y eso lo resolvieron los mismos empleados”, denunció Rivera, quien también es arqueólogo y maestro de Historia. 

Es por eso, que la comunidad creó el movimiento Tibeños Unidos, Inc., con el propósito de desarrollar una propuesta para que el Municipio Autónomo de Ponce le permita administrar el Centro Ceremonial Indígena.

“Nosotros queremos que el Centro Ceremonial Indígena de Tibes pase a manos de la comunidad, que sea la comunidad que lo administre, que sea la comunidad quien genere empleos, ya que Tibes es una comunidad a donde hay un alza en el desempleo y por eso muchos tibeños se han ido del país”, destacó Rivera Collazo.

Según el portavoz comunitario, el proyecto también pretende rescatar la Escuela Julio Collazo Silva del barrio Tibes, que fue removida a otro plantel debido a los destrozos ocasionados por el huracán. Esta comunidad escolar incluye residentes de Tibes, Rio Chiquito, La Mocha, Burenes, Aguacate, quienes ahora tienen que bajar en transporte escolar hasta una escuela en la PR-14.

“Que esa escuela regrese a los terrenos del Centro Ceremonial Indígena de Tibes y que se convierta en una escuela especializada en agricultura, historia, antropología, biología, estudio de aves y plantas, en herbolaria, gastronomía, porque tenemos todos esos recursos dentro del centro”, agregó Rivera.

No obstante, el arqueólogo Rivera Collazo destacó que la comunidad no pretende desplazar al Gobierno Municipal, sino crear un acuerdo cooperativista.  A la vez, rechazó que el centro pase a manos del Sistema de Parques Nacionales, de acuerdo a una legislación presentada por la comisionada residente, Jennifer González en noviembre de 2017.

“Eso no lo vamos a permitir, primero me matan o me meten preso antes de hacer eso. Y eso no va a funcionar con el gobierno de Donald Trump, porque todo lo que ha hecho ese gobierno es lo contrario, quitarle fondos a Parques Nacionales en Estados Unidos, lo que ha encarecido la entrada a esos parques”, resaltó.

Rivera sostuvo que tanto la directora de Turismo del Municipio de Ponce, Crystal J. Bell, como el director de la Oficina de Desarrollo Cultural, Julio Amill Martínez, “han estado en la mejor disposición de contribuir a este proyecto, han colaborado y quieren trabajarlo con la comunidad”.

“Yo lo que solicito es que tanto la Alcaldesa como los demás administradores, los dejen trabajar, que no se meta nadie a tratar de copiar este proyecto para traer a otras personas y meterlos aquí a politiquear”, advirtió.

Por su parte, el director de la Oficina Municipal de Desarrollo Cultural, confirmó que está en plena disposición de escuchar la propuesta comunitaria. Aunque al presente no ha tenido un acercamiento formal. 

“Hasta el momento, la comunidad no ha hecho ningún acercamiento directo, sin embargo, hemos tenido colaboraciones con grupos comunitarios y hemos hecho algunas cosas educativas para la comunidad.  Estamos para la colaboración, porque ¿cómo más vamos a echar las cosas hacia adelante?”, señaló Amill Martínez.

El funcionario destacó que actualmente hay seis empleados asignados al parque, unos a tiempo parcial y otros a tiempo completo.

“Esto incluye desde guía turístico, personal de administración, de limpieza y guardia de seguridad. Hace falta quizá como guías turísticos, pero estamos haciendo acercamiento a diferentes instituciones educativas, para que personas que estén estudiando Turismo puedan acercarse y ofrecernos apoyo en el Centro Ceremonial”.

De otra parte, Amill desmintió que el centro esté cerrado, tal como se  ha difundido en las pasadas semanas.

“Para el crucero del 25 de diciembre, que fue el que recibimos después de María,  ya los empleados del Centro Ceremonial junto a una brigada de voluntarios y empleados del Departamento de Desarrollo Cultural, se dieron a la tarea para que pudiera abrir a tiempo y desde entonces sigue abierto en el horario regular que es de martes a domingo de 9:00 a 3:00 de la tarde ”, indicó el director de la Oficina Cultural.