Arecibo. Como todos los ciclos, el de Walter Hodge con los Capitanes de Arecibo llegó a su fin cuando fue enviado a los Cangrejeros de Santurce en un cambio por el joven escolta Alfonso Plummer y un turno de primera ronda del Sorteo de Nuevo Ingreso 2026.

Y tras ocho meses del canje que lo tomó por sorpresa, Hodge regresó el viernes al Coliseo Manuel “Petaca” Iguina. Esta vez no se dirigió al camerino local que utilizó por nueve temporadas y tampoco vistió los tradicionales colores de los Capitanes.

Pero eso no detuvo a la afición arecibeña demostrarle a Hodge que todavía le guardan cariño. A su entrada al tabloncillo de Arecibo, el veterano armador de 37 años realizó como siempre su calentamiento antes de cada partido, pero fue detenido en diversas ocasiones por fanáticos que le dieron una cálida bienvenida con abrazos, besos y hasta pidiéndole fotos.

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No fue una sorpresa, pues fue en esa cancha donde Hodge se forjó en uno de los mejores jugadores del Baloncesto Superior Nacional (BSN) en la pasada década e impulsó a los Capitanes a tres campeonatos. Y quizás eso haga que por sus venas corran para siempre el amarillo y negro, aunque tenga el nombre de otro equipo en su pecho.

“Fue una experiencia bien bonita. Es un equipo al que le di mucho. Mi desarrollo fue aquí. Aquí fue donde me convertí en un buen jugador y ver a esa fanaticada apoyando y sabiendo lo que uno ha hecho es especial”, dijo Hodge en entrevista con Primera Hora.

“Obviamente, estuvieron un poco con los sentimientos encontrados porque estás jugando en contra, así que no te van a aplaudir todo el tiempo y te van a abuchear, pero al final del día yo siempre he respetado a esta franquicia y esta es mi casa. Yo me siento en familia aquí”, aseguró.

Claramente, se notó desde las gradas que este no era un partido cualquiera para el experimentado base. Hodge arrancó agresivo, buscando su primer canasto, pero tuvo un lento inicio. A pesar de ello, calentó en el transcurso del juego y registró 26 puntos, cinco rebotes y dos asistencias en la derrota de los Cangrejeros por 104-102 ante los Capitanes.

Durante el desafío, Hodge se encontró en el otro lado de la cancha a canasteros que llamó compañeros de equipo por muchas campañas y a quienes considera hermanos como Víctor Liz, Jonathan Rodríguez, Raymond Cintrón y Wilfredo “Wllie” Rodríguez.

Walter Hodge saluda a Raymond Cintrón y Jonathan Rodríguez previo al partido del viernes entre los Capitanes de Arecibo y los Cangrejeros de Santurce.
Walter Hodge saluda a Raymond Cintrón y Jonathan Rodríguez previo al partido del viernes entre los Capitanes de Arecibo y los Cangrejeros de Santurce. (Nahira Montcourt)

Cardona y su aprecio por Walter

Y desde la línea estaba el dirigente de Arecibo, Juan Cardona, quien tuvo un papel en el desarrollo del veterano armador desde las categorías menores.

“A Walter Hodge yo lo amo. Es el primer jugador que yo bequé en Discípulos de Cristo y es el jugador que multiplica en gran parte lo que es Juan Cardona. Yo tuve a Walter de bebé desde noveno a décimo grado y es un guerrero. Tú nunca puedes contarlo fuera porque él va a seguir y esa es la marca de un ganador”, comentó, por su parte, Cardona.

Más allá del retorno de Hodge al “Petaca”, el encuentro entre los Capitanes y Cangrejeros quizás fue un pase de batón al próximo nativo que podría liderar a la franquicia más ganadora del nuevo milenio a su siguiente título.

En una noche que otras exestrellas de Arecibo como David Huertas y Danny Santiago se dieron cita al “Petaca”, a Plummer no le tembló el pulso y mucho menos frente a Santurce, su antiguo equipo. El escolta de 26 años terminó con 18 unidades.

“Fue una noche bien bonita, pero ver en lo que se está convirtiendo ese próximo capitán de los Capitanes de Arecibo (Alfonso Plummer) es especial… Bendecido con papá Dios por poder haber visto esta guerra”, indicó el estratega.

Con Plummer, a los Capitanes no les va para nada mal y están en la primera posición de la Sección A con un récord de 14-3, el mejor en la liga.