Miami. La fortaleza de los Criollos de Puerto Rico en la Serie del Caribe ha sido su cuerpo monticular, que está compuesto por 15 lanzadores y cinco de ellos son estadounidenses.

Se trata de Derrick Adams, Lincoln Henzman, Daryl Thompson, Luke Westphal y Danny Wirchansky, quienes nunca habían tenido la oportunidad de jugar en un estadio de Grandes Ligas y ahora lo están haciendo en el loanDepot Park, en Miami, Florida, donde han conocido de primera mano cómo distintas culturas caribeñas se viven el béisbol.

“Ha sido bien emocionante. La atmósfera aquí ha estado espectacular. Fue definitivamente la mayor multitud ante la que he lanzado y la forma en la que los fanáticos reaccionan durante los juegos ha hecho que esto sea una gran experiencia”, comentó a Primera Hora Westphal, quien fue el abridor el pasado domingo contra los Tiburones de la Guaira de Venezuela frente a 32,092 personas.

“Típicamente, en la liga menor u otros lugares, el público no está tan entregado como aquí cuando están jugando Venezuela, República Dominicana y Puerto Rico. Los fanáticos están mucho más metidos en el juego y eso crea un ambiente asombroso”, agregó.

Westphal, quien se estrenó esta temporada del béisbol invernal con los Indios de Mayagüez, tuvo una brillante actuación ante Venezuela al ponchar a cinco bateadores en 2.1 entradas trabajadas.

El zurdo jugó en el 2021 y 2022 nivel Triple-A con los Chihuahuas de El Paso, afiliado de los Padres de San Diego, pero optó por la agencia libre en ese último año. Desde entonces, no ha formado parte del béisbol organizado y no tiene ofertas concretas de liga menor. Pero, espera capturar la atención de alguna organización con un escenario de la magnitud de la Serie del Caribe.

“Ahora mismo no hay mucho, pero ojalá algo bueno llegue de este torneo”, sostuvo el lanzador de 34 años y oriundo de Clintonville, Wisconsin.

Otra historia similar a la de Westphal es la de Henzman, quien también debutó esta campaña de la pelota invernal con los Indios y está disputando su primera Serie del Caribe. En lo que va de certamen, Henzman se subió al montículo ante los Gigantes de Rivas de Nicaragua, Naranjeros de Hermosillo de México y Tiburones. De cara a la jornada del miércoles, tiene una efectividad de 1.93 con cuatro abanicados en 4.2 capítulos lanzados.

Para Henzman, poder lanzar ante más de 30,000 personas por primera vez en su carrera le ha servido como motivación para algún día convertir un estadio de las Mayores en su segundo hogar como relevista del alguna organización.

“En mi carrera, he lanzado ante 17,000 personas, pero nunca ante más de 30,000. Aquí cada pitcheo cuenta... Como atleta y persona, una experiencia como esta te deja saber que existe un potencial de que puedas jugar a este nivel y escenario. Ojalá algún día pase, pero si no sucede nunca olvidaré lo que viví aquí“, afirmó Henzman.

El derecho fue dejado en libertad a mediados de mayo del 2023 por los Barons de Birmingham, novena filial Doble-A de los White Sox de Chicago.