En el marco del Día Mundial de la Salud, que se celebra hoy, domingo, 7 de abril, es crucial reflexionar sobre la experiencia del paciente en el sistema de atención médica. Pero ¿qué entendemos por experiencia del paciente? Esta se refiere a cada una de las interacciones entre los pacientes y el sistema de salud, desde la calidad de la atención clínica hasta la comunicación con el personal médico y la facilidad de acceso a los servicios de salud.

La experiencia del paciente se trata de mucho más que un proceso de “satisfacción al cliente”. Asegurar que un paciente tenga una buena experiencia en sus interacciones con el sistema de salud y sus componentes impacta directamente los resultados de salud que este obtiene.

Los pacientes de cualquier edad continuamente se enfrentan a muchos retos en el proceso de recibir servicios de salud. Esto incluye, por ejemplo, completar formularios médicos con conceptos o términos que desconocen, navegar en el sistema de salud, entender la terminología clínica, retener instrucciones de dosificación de medicamentos y monitorear controles. Esto ocurre en momentos donde el paciente también se encuentra manejando la preocupación de su estado de salud, por lo que la comunicación efectiva entre el médico y el paciente es clave para lograr resultados óptimos.

El médico es una pieza vital en el cuidado de la salud del paciente y, durante el encuentro, puede implementar técnicas de comunicación efectivas. De esta manera, los pacientes no solo entienden su estado de salud, sino que también pueden implementar las recomendaciones sobre su cuidado para tomar la acción adecuada para su bienestar.

Ahora bien, ¿cómo se establece esta comunicación efectiva entre médico-paciente? A continuación, algunas de las principales estrategias:

1. Lenguaje simple

Es importante presentar la información verbal y escrita de forma sencilla, y evitando el uso de términos médicos, para que el paciente pueda entenderla desde la primera vez que la escucha o la lee.

2. Ambiente libre de juicios

Permite que las personas se sientan cómodas haciendo preguntas, fomentando el respeto y atención hacia el paciente.

3. Teach-back (enseñanza por retroalimentación)

Este método le pide al paciente explicar en sus propias palabras lo que entendió para asegurar que comprendió lo que se le explicó sin sentirse juzgado o avergonzado.

El médico es responsable de escuchar al paciente, tomando en consideración su opinión y sus preocupaciones, responder sus preguntas y recomendarle un tratamiento adecuado para sus necesidades individuales. Al emplear estas prácticas, los médicos facilitan que el paciente comprenda las instrucciones y pueda tomar acciones alineadas con el plan de cuidado recomendado. Esto contribuye a que tome sus medicamentos de la forma indicada, aumente su adherencia al tratamiento y tenga mayor oportunidad de obtener los resultados deseados, alcanzando un estado de salud óptimo para su condición. Cuando todos estos elementos están en armonía, se puede considerar el cuidado de salud del paciente como uno eficiente y efectivo.

Una práctica clínica que promueve una comunicación efectiva y clara entre el médico y el paciente logra mejores resultados. Incluso, optimiza el manejo de condiciones crónicas, puede reducir la readmisión al hospital, disminuye la utilización innecesaria de servicios de salud, y fomenta mayor confianza y relación entre el equipo médico y el paciente, entre otros beneficios.

Todos los componentes en el sistema de salud son responsables de proveer información de salud que se pueda comprender y que sea accesible para todos, esto incluye a los profesionales de la salud y al personal administrativo. El apoyo a los pacientes para que puedan encontrar, comprender y utilizar la información de salud, tiene resultados positivos a corto y a largo plazo. Una práctica clínica que promueva comunicación efectiva, un ambiente sin juicios, que practique la escucha activa e involucre a sus pacientes en la toma de decisiones sobre su salud, garantiza pacientes comprometidos con su cuidado y más satisfechos con la experiencia de servicio.

En MCS reafirmamos nuestro compromiso con ayudar a nuestros afiliados a alcanzar buenos resultados clínicos en su cuidado, por lo que implementamos diversas iniciativas que facilitan la comprensión de la información de su salud. La experiencia del paciente debería ser prioridad de todos; tanto por los pacientes como por los médicos, hospitales y el resto de las entidades que componen el sistema de salud, públicas y privadas.