Belgrado, Serbia. - Carlos Arroyo quería alargar su carrera en la Selección Nacional. No quería que el juego de ayer contra Letonia fuera su último vistiendo la franela puertorriqueña.

Y mientras corría el cerrado duelo contra Letonia, Arroyo reconoció que le pasó por la mente la idea que no volvería a jugar con Puerto Rico. 

 Al final del juego,  agradeció que no lo fue. Lo dijo con alegría y sonriendo, y cualquiera pensaría  que era el jugador más feliz de la escuadra. 

Arroyo no quería colgar la camiseta nacional sin tener otro turno para tratar de clasificar a unos Juegos Olímpicos. Y su deseo fue cumplido con una emocionante victoria de  77-70 ante Letonia.

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Hoy, Arroyo y el combinado nacional volverán al tabloncillo y disputarán el pasaje a los Juegos de Río de Janeiro ante Serbia a partir de las 3:00 de la tarde, hora de Puerto Rico. 

“En los últimos cinco minutos, en mi mente solo pensaba: ‘no quiero retirarme hoy (ayer)’”, admitió Arroyo a la conclusión del encuentro. 

“Este equipo significa mucho para mí. Representar mi país es lo que me encanta hacer. Entiendo el compromiso de ponerme este uniforme. Ha sido un largo camino desde que comencé en el 2001. Antes del juego estaba un poco triste porque no quería irme así (con un revés ayer). Quería darme a mí y al grupo una oportunidad de clasificar a las Olimpiadas. Aquí, solo Eddie Casiano, Peter John Ramos, Manolo Cintrón y yo tenemos experiencia en unas Olimpiadas (Atenas 2004) y muchos de estos jugadores llegaron con el sueño de clasificar. No quería retirarme hoy (ayer). Solo quería tener otra oportunidad, así que salí a jugar con el corazón”, abundó Arroyo, quien retornó este año al programa nacional, luego de ser excluido el pasado año por el mentor Rick Pitino en el Preolímpico de México.

El jugador, de 36 años, también fue factor importante en el triunfo de ayer. Aportó 14 puntos, incluyendo un crucial canasto de tres puntos para ampliar la ventaja 73-70 restando apenas 35 segundos. No le dio el frío olímpico. Simplemente, ejecutó en el clutch.

“Estaba pensando en atacar el canasto y recibir una falta personal para ir a la línea de tiros libres, pero algo me dijo que me echara hacia atrás y lanzara (de tres puntos). Estoy contento de haber anotado el canasto. Me gustan estos momentos grandes… esa responsabilidad. Y lo hago con orgullo”, afirmó. 

Puerto Rico ya enfrentó a Serbia en la ronda inicial y  sufrió una derrota, 87-81. 

Arroyo solo tuvo una expresión al hablar del compromiso de hoy: “Ya nos dimos este regalo de llegar a la final y lo vamos a dar todo”.