La Serie del Caribe tiene nuevo campeón. Cuba regresó al más alto sitial.

El derecho Yosvani  Torres lanzó una joya monticular para guiar hoy a los Vegueros de Pinar del Río de Cuba a una victoria, 3-2,  ante los Tomateros de Culiacán para darle a los cubanos su primer campeonato desde el 1960, último año que participaron en la Serie del Caribe.

Cuba regresó a participar el año pasado al evento caribeño como país invitado.  En Venezuela, los cubanos quedaron en último lugar, pero desde un principio dijeron que este año no sería igual.

Y así lo cumplieron luego de quitarle el invicto a los Caribes de Anzoátegui de Venezuela en la jornada semifinal, para anoche completar la gesta.

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Luego del partido, el dirigente ganador, Alfonso Urquiola, solo tuvo palabras de elogios para los rivales.

“Esta fue una serie muy competitiva. Mi mayor respeto para todos los equipos participantes. Creo que fue una serie que todos los equipos dieron lo mejor de sí. Fue un gran espectáculo, independientemente de quién haya ganado”, aseguró Urquiola.

Lo mejor fue que los Vegueros lo hicieron sintiéndose como equipo local, pues más de la mitad de los 7,634 fanáticos presentes en el estadio Hiram Bithorn gritaron  “Cuba, Cuba, Cuba” en los momentos en los que los  relevistas Liván Moinelo y Luis Mendoza se metieron en problemas.  

Torres lanzó pelota de dos hits, permitió una carrera y ponchó a cinco bateadores en seis entradas. Además,  llevó un juego sin hits hasta la quinta entrada. 

La ofensiva cubana conectó 11 inatrapables –siete de ellos en los primeros dos episodios-,  incluido un enorme cuadrangular de Yulieski Gourriel. 

El veterano Frederich Cepeda remolcó la primera anotación de la novena cubana en la misma primera entrada  con un batazo  al jardín central.

En la segunda entrada, los Vegueros volvieron a conectar bien la bola colocando corredores en las primeras dos almohadillas. Un inatrable de Luis Y. La O añadió otra rayita al pizarrón para el 2-0. 

Torres lucía imbateable, mientras que su contraparte Anthony Vázquez  respondió dando tres ceros consecutivos luego de permitir las primeras dos anotaciones de los Vegueros en el partido. 

Vázquez permitió dos carreras y toleró siete hits en cinco entradas trabajadas.

Sin embargo, en la quinta entrada, los Tomateros lograron descifrar los envíos de Torres. Joey Meneses conectó un  fuerte doble que dio contra la verja del jardín central para hacer sal y agua el no-hitter del abridor derecho. 

Acto seguido,  Russel Brayan fue dominado y  José Rodríguez recibió pelotazo. Entonces, Walter Ibarra se encargó de traer la primera rayita para acercar a los Tomateros 2-1.

En el octavo episodio, el enorme batazo de Gourriel al jardín izquierdo, ante el relevista Juan Delgadillo,  le dio la estocada a los Tomateros. Para muchos,  esa quizás fue una herida mortal. 

Los Tomateros volvieron a la carga en la parte baja de la octava ante el descontrol del relevista  Moinelo. 

Luego de conseguir los primero dos outs, Moinelo embasó al primer bate Rico Noel y permitió un sencillo de Maxwell León. El dirigente cubano Alfonso Urquiola le aplicó la grúa a Moinelo  para traer a  Mendoza, quien permitió un sencillo de Eric Farri que acortó la ventaja sobre los Tomateros, 3-2.

Pero la remontada se quedó corta. 

De esta forma, se termina el reinado de México en la Serie, país que había ganado los últimas dos  ediciones  de forma consecutiva.

Cepeda fue nombrado como el Jugador Más Valioso del torneo.

“Lo principal es que el equipo logró la victoria, que es lo que estábamos esperando. Soy un atleta más que me sumo al colectivo. Tuve un buen partido de ayer (sábado). No esperaba ser el Más Valioso. Solo me lancé a ser  mi trabajo. Estoy muy contento por esto”,  manifestó Cepeda, quien se fue de 5-4,  con cinco remolcadas ante Venezuela en la semifinal.

Por su parte, el dirigente de los Tomateros, Benjamín Gil, habló de lo que era una comidilla en las gradas. Los Vegueros fueron el mejor equipo en los últimos dos días de la Serie. 

“Cuba fue el equipo que mejor jugó sábado y domingo. Cuba fue campeón.  Si Puerto Rico le hubiese ganado a Cuba, ellos estarían eliminados. Ellos hicieron su parte para ganar el campeonato. No le voy a quitar el crédito a Cuba porque le ganó a un equipo luego de haber estado abajo 4-0 en las primeras cinco entradas. Ganaron con un juego bien jugado, de forma contundente, ante un equipo invicto”,  sentenció Gil.

Miles de fanáticos asistieron al juego final de la Serie del Caribe celebrado en el estadio Hiram Bithorn.