Para lograr los sueños hay que hacer todo tipo de sacrificios y el cubano Loah Linares está consciente de ello, aunque su meta parezca difícil de conseguir.

Linares lleva más de dos semanas acampando en una acera frente al Dodgers Stadium, el hogar de la novena angelina, en espera de que la organización le dé la oportunidad de una prueba (try out) para intentar hacer el equipo. 

Varios medios de comunicación han entrevistado a Linares, quien es un jugador de cuadro y puede jugar segunda base, campocorto o la antesala. 

“Si no supiese cuan buen jugador de béisbol sé que soy, no estaría aquí tratando de demostrarle a alguien mi talento”, dijo Linares, de 22 años, en entrevista con ABC7 Los Ángeles. 

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“Tengo mucho deseo de conseguir cada una de mis metas y los Dodgers de Los Ángeles deben saber que yo tengo lo que se necesita”, expresó Linares en el vídeo Dodger Dream.

“Es un sacrificio que estoy dispuesto a tomar ya que estoy buscando mi sueño para poder ayudarme a mí mismo, ayudar a mi familia en Cuba”, expresó Linares en una entrevista con el programa Al Rojo Vivo de la cadena Telemundo. 

Linares juega béisbol desde los ocho años y explicó que si se hubiese quedado en Cuba estarái jugando para los Industriales de La Habana en la liga de la Serie Nacional de Béisbol en la Mayor de las Antillas. 

El cubano agradeció la ayuda que ha recibido de fanáticos de la novena que le han suministrado comida y agua en el tiempo que lleva su campamento. 

De igual forma, Linares sostuvo que conoce muy bien la historia de los Dodgers, desde su época en Brooklyn y tiene como uno de los ídolos a Jackie Robinson, primer pelotero de la raza negra en jugar en las Grandes Ligas.

En su momento, Linares intentó entrar al estadio durante una práctica del equipo, pero la seguridad del lugar lo detuvo. “Ahora mismo no tengo teléfono, carro para moverme, eso me limita. Pero si me dan la oportunidad un día, voy a impresionar a cualquier persona que me pueda ver”, aseguró Linares, quien si reúne el dinero suficiente, estará dispuesto a moverse a Arizona, estado en donde los Dodgers celebran su campo de entrenamiento primaveral y en donde realizan pruebas a jugadores interesados.