Río de Janeiro. Algunos de los pesos pesados de Europa no la han pasado bien en Brasil. España e Inglaterra ya están empacando maletas, mientras que Italia ya sufrió un inesperado revés ante Costa Rica. 

Tal vez es el momento de que sean otros equipos los que saquen la cara por el Viejo Continente. Esa selección podría ser la de Bélgica, un conjunto que, silenciosamente, entró a la Copa Mundial de Brasil 2014 tras una soberbia eliminatoria, y que posee una de las mejores plantillas jóvenes del torneo.

Bélgica jugará hoy en el gran escenario de este Mundial, el Estadio Maracaná de Río de Janeiro, frente a una Rusia que perfila como su primera gran prueba del torneo. Los belgas vienen de superar vía remontada a Argelia, 2-1, en la jornada inaugural el pasado martes para sumar sus primeros tres puntos.  

Pero ahora el nivel subirá contra Rusia, que perfila como favorita para acompañar a los belgas como los dos clasificados del Grupo H. El partido en el Maracaná está pautado para las 12:00 de la tarde, hora de Puerto Rico. 

De ganar, Bélgica poncharía su boleto a los octavos de final. 

¿Qué hace a esta Bélgica tan especial? Primero, la gran manera en la que se clasificó a Brasil. Los llamados “Diablos Rojos” terminaron invictos tras diez partidos en el Grupo A de la complicada eliminatoria europea con ocho victorias y dos empates. En la llave, la cual contaba con equipos de nivel como Croacia y Serbia, Bélgica terminó con 18 goles anotados y tan solo cuatro encajados.

Mientras, una nueva generación de talento coloca a los belgas como una selección de futuro. Su mayor rostro es Eden Hazard, joven atacante de 22 años que juega en el Chelsea. El portero Thibaut Courtois, también del Chelsea, jugó a préstamos la pasada temporada con el Atlético de Madrid y sus 22 años brilló como uno de los mejores guardametas de la Liga española.

Nacer Chadli (24 años, Tottenham), Romelu Lukaku (21, Chelsea)  y Toby Alderweireld (25, Atlético de Madrid) son algunos de los jóvenes que se unen a futbolistas establecidos como el capitán Vincent Kompany (28, Manchester City) para formar una plantilla capaz de irse tú a tú con cualquiera.

Por ahora, en Bélgica sueñan con repetir la gesta del Mundial de México 1986, cuando sus “Diablos Rojos” finalizaron en el cuarto lugar. Pero el técnico Marc Wilmots avisó ayer que eso no será tarea fácil en una Copa que ha lucido muy competitiva.

“El potencial está ahí. Pero cuando uno ve lo que le pasó a Inglaterra, España e Italia, uno realiza que en un Mundial puede suceder cualquier cosa. Pero, al momento, el grupo está unido y apoyado por el público belga. Pero el pasado se acabó. Ahora, mis jugadores tienen el futuro a sus pies”, declaró Wilmots en conferencia de prensa en Maracaná.

Para el partido de esta tarde contra Rusia, está en duda la participación de Kompany por una dolencia de ingle. 

Por otro lado, el experimentado técnico de Rusia, el italiano Fabio Capello, solo tuvo palabras de elogio para los belgas durante su turno al micrófono ayer en Maracaná.

“Es un equipo muy equilibrado, muy compacto, con grandes jugadores en todas las zonas del campo. Creo que Wilmots ha hecho un buen trabajo y tiene el mejor equipo desde los años 80”,  sentenció Capello.