Las personas que hacen algún ejercicio durante el día, sea caminar, correr bicicleta, levantar pesas o incluso yoga, duermen mejor que las personas que no hacen nada o que su actividad física consista en atender a hijos e hijas y hacer tareas domésticas.

La relación entre ejercitarse y la calidad del sueño ya se había demostrado, pero el nuevo estudio de la Escuela de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania buscaba si específicamente algunas actividades físicas influían en el período de descanso.

Con datos sobre  el sueño y las actividades físicas de más de 400 mil adultos del Sistema de Vigilancia de Factores de Riesgo del Comportamiento de 2013, los investigadores del estudio dirigido por el profesor de psiquiatría Michael Grandner analizaron si diez actividades físicas influían en la cantidad y calidad del sueño.  A los encuestados se les preguntó cuál fue la actividad física que más practicaron en el último mes y cuánto durmieron en un período de 24 horas.

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Debido a que otros estudios han demostrado que las personas que duermen menos de siete horas están en mayor riesgo de problemas de salud, la investigación también evaluó si quienes reportaban actividades específicas informaban que habían dormido suficientes horas.

En comparación con los que dijeron que no habían hecho ningún tipo de actividad física, todos los que hicieron alguna (excepto trabajo doméstico y cuidar niños) reportaron una mejor calidad de sueño. Para evaluar si ese efecto era con cualquier tipo de ejercicio, los resultados  fueron entonces comparados con los que dijeron que su actividad principal fue caminar. Los aeróbicos, el ciclismo, la jardinería, correr, yoga, pilates y levantar pesas fueron asociadas con menos casos de sueño insuficiente, mientras que el trabajo de la casa fue vinculado con falta de sueño.

“Este estudio no solo demostró que los que hacen ejercicios sencillos como caminar son más propensos a tener mejores hábitos de sueño, sino que los efectos son más fuertes en actividades más intensas como correr, el yoga y hasta la jardinería y el golf. También fue interesante encontrar que las personas cuya actividad física consiste en labores domésticas y cuido de niños tienen una mayor tendencia a experimentar falta de sueño”, señaló Grandner, según reseñado en el portal EurekAlert.

El psiquiatra destacó, además, que la falta de sueño está asocuada con peor rendimiento físico y mental.