El nombre de Elías “Larry” Ayuso sonó desde un principio entre las posibles figuras que vestirían el uniforme de los Cariduros de Fajardo para este regreso al Baloncesto Superior Nacional (BSN) y parece que la idea nunca dejó de rondar por las mentes gerenciales del quinteto.

Este plan de juntar a Larry Ayuso con Carlos Arroyo nuevamente, luego de sus inolvidables años con los Cangrejeros de Santurce y con la Selección Nacional, cobró forma el pasado domingo, 30 de abril cuando el ex integrante de los Brujos de Guayama se puso la camiseta #10 del equipo fajardeño.

El recibimiento, tanto del equipo como de la fanaticada cumplió con las expectativas del jugador, quien se sintió como en casa, no empece a que una semana atrás había pisado el mismo tabloncillo para enfrentarse a los Cariduros.

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“Me siento muy feliz. Hay un ambiente positivo en el equipo y con la fanaticada. El grupo se siente como una familia. Me sentí muy bien con el grupo que es lo más importante. Estoy muy contento de poder estar en los Cariduros de Fajardo”, expresó Ayuso, luego de culminar su primer partido.

A pesar de no haber tenido un partido muy explosivo, pues solo anotó dos tiradas libres, el veterano escolta espera poder caer en tiempo rápidamente, máxime cuando el cambio se logró bastante temprano en la temporada.

“Estoy todavía acoplándome para aprenderme las jugadas, pero me siento muy bien. El acoplarme al equipo y al sistema de Allans no va a ser un problema. Sé que en las prácticas poco a poco voy a caer en tiempo. Estoy ‘ready’ para batallar”, indicó.

Asimismo, el hecho de unirse a veteranos como Arroyo y Filiberto Rivera, mantienen el ánimo de Ayuso elevado.

“Es un honor poder estar en la cancha otra vez con Carlos y con Filiberto. Eso es una bendición. Van a haber muchos momentos para estar juntos en la cancha y disfrutar lo que nos gusta que es jugar baloncesto”, sostuvo el escolta.

En el plano personal, el suelo cariduro le resulta familiar a Elías Ayuso, debido a que es el pueblo natal de su esposa, la presentadora Angelique Burgos, lo que hace del cambio uno más llevadero para la familia.

“Siempre venimos a Fajardo ver a la mamá de Angelique y la pasamos muy bien por acá. Siempre nos reciben con mucho cariño. Angelique está bien feliz de que yo represente a su pueblo y poder apoyarme aquí donde se crió, con su fanaticada”, expresó el baloncelista.