El secretario de Estado, David Bernier, informó esta tarde que el Gobierno de la Isla hará todos los esfuerzos necesarios para evitar que ningún beneficiario del Programa de Asistencia Nutricional, del Programa de Nutrición Suplementaria para Mujeres, Infantes y Niños (WIC, por sus siglas en inglés), de los programas Título I para niños con rezago en el aprendizaje y Medicaid se vean afectados por un cierre del Gobierno federal.

Bernier señaló que la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP) está evaluando cada programa y los fondos que serían necesarios para sustituir las partidas con fondos estatales, de ser necesario.

Puerto Rico recibe trato especial en algunos de esos programas. Algunos fondos, por ejemplo, nos llegan en bloque y en caso de que Puerto Rico tuviese que adelantar alguna partida, sería reembolsado por el Gobierno federal.

“OGP tiene un listado de las partidas y se está comunicando con los jefes de agencias para establecer estrategias, según cada programa”, señaló Bernier, quien sostuvo que el historial de cierres anteriores ha sido corto, de horas, en algunos casos, de días en otros, y a lo sumo de dos semanas.

Si ese periodo se extendiera, las consecuencias serían más severas y las posibilidades de que el Gobierno estatal sustituya temporalmente las partidas con su propio dinero serían cada vez más difíciles.

La posibilidad de un cierre del Gobierno federal debe conocerse esta noche.

El tranque entre demócratas y republicanos en el Congreso de Estados Unidos se basa fundamentalmente en el interés de los republicanos más conservadores de descarrilar la Reforma de Salud de los Estados Unidos, conocida como Obamacare.