Sin embargo, la firma de la orden ejecutiva avivó ayer preocupaciones de líderes sindicales que estiman que el desfalco en Carreteras redundará en terribles daños en la infraestructura vial de la Isla.

Hoy la ACT repara algunas carreteras, pero con fondos federales casi única y exclusivamente, confirmó el miércoles la propia corporación pública, que adeuda a sus suplidores sobre $150 millones.

Mientras, hablar de obras nuevas es algo que prácticamente no se maneja en la ACT, que adeuda $2,200 millones y es quizás la entidad más emblemática de la crisis fiscal.

García Padilla dijo temprano que la orden que emitió de no depositar los fondos de peaje en el organismo que le paga a Carreteras su deuda solamente durará hasta   próximo 30 de junio. A partir de esa fecha, la ACT debe haber recuperado su liquidez, o efectivo,  a través de los fondos que se le asignen en el presupuesto del año que inicia el 1 de julio, dijo el mandatario en rueda de prensa. 

La Autoridad, sin embargo, está tan lastimada que empleados gerenciales y unionados del organismo no creen lo señalado por el Gobernador.

Si la ACT no se recupera,  los ciudadanos van a ver un sistema vial en peores condiciones que nunca y sus  principales autopistas van a ir pasando a manos privadas, dijeron entrevistas separadas el asesor de la Asociación de Empleados Gerenciales de la ACT, Gonzalo Aponte, y Lissette Barreto Pérez, presidenta de la Unión Prosol-Utier, capítulo de Carreteras.

Reina de los hoyos

Ahora mismo, la Autopista 52, de San Juan a Ponce, es la que más desperfectos presenta entre todas las carreteras que maneja la Autoridad,  dijo el presidente de la Asociación de Empleados Gerenciales, José Colón Cruz.

La  Autopista 52 tiene múltiples boquetes y algunos de sus puentes necesitan reparación urgente. Las áreas más afectadas, dijo Colón Cruz, son el tramo frente a Plaza Las Américas y la zona de Cayey, en dirección hacia Ponce.

En esa autopista no se están realizando reparaciones, confirmó ayer la ACT.

Mientras, Barreto Pérez aseguró, por otro lado, que también urge que se repare  la PR- 30, en dirección a  Humacao.

Los líderes sindicales indicaron que hay problemas además en las carreteras PR-2 y PR-3, sin entrar en detalles sobre los tramos más críticos.

“La emergencia que estoy decretando no tendrá ningún efecto negativo adicional. Tenemos problemas de efectivo, no podemos ir a los mercados de bonos; quisiéramos tener el dinero para asfaltar. pero a veces no lo tenemos”, dijo García Padilla al anunciar que la ACT  se acogía a la Ley de Moratoria en el pago de las deudas del Estado Libre Asociado.

García Padilla explicó que la ACT necesita alrededor de $25 millones mensuales para poder continuar sus operaciones y para proveerles servicios esenciales a la ciudadanía. Parte de ese dinero se van en nómina y la orden evitaría retrasos en el pago a los empleados.

Estado calamitoso

El mandatario aseguró que el dinero que proviene de los peajes, que todavía maneja la ACT, no serán enviados en los  próximos dos meses al llamado “trustee” (monitor) que recibe y guarda los adelantos para el pago de la deuda de Carreteras.

La ACT tiene depósitos allí pagos hasta el 2018, afirmó el Gobernador, quien estableció que los acreedores no se afectan “en nada”.

La dependencia estatal recibe por concepto de peajes $10 millones al mes, informó García Padilla 

“Esta agencia tiene capacidad para producir ingresos y la han quebrado", lamentó , por su parte, Barreto Pérez, quien sostuvo que la ACT ha llegado al estado calamitoso en que está porque la han usado para darle respiración artificial al Tren Urbano, a la Autoridad Metropolitana de Autobuses, a la Autoridad de Transporte Marítimo, a la Autoridad de Puertos  y al sistema de transporte integrado de San Juan.

Carreteras también tuvo en revés al no lograrse aprobar a tiempo el impuesto de 2014 sobre los derivados del petróleo (La Crudita).

Eso le impidió acceder a los mercados de bonos, que se le cerraron indefinidamente, argumentaron líderes sindicales. 

La corporación ha padecido el síndrome de las contrataciones sin límite, mientras poco a poco se ha ido quedando sin empleados, señaló Barreto Pérez.

Las organizaciones profesionales y obreras de la ACT manifestaron que el gobierno también hizo un negocio malísimo con Metropistas,  al extender su contrato de la PR-t22 por 10 años más, a cambio de $115 millones adicionales.

Los sindicatos han recalcado que la experiencia dicta que si los  ingresos de peajes estatales se ceden  a la empresa privada, las obligaciones y deudas de la agencia permanecen en la agencia, provocando un endeudamiento mayor que asume el pueblo.

Proyectos  pagados con dinero del gobierno federal

La Autoridad de Carreteras y Transportación realiza ahora pocos proyectos de reparación de carreteras, la mayor parte con fondos federales porque apenas tiene dinero propio y no puede tomar prestado. Algunas obras en proceso son:

Proyecto de limpieza y rehabilitación de un tramo de la carretera PR-185 en Juncos, perjudicada  por un deslizamiento.

Repavimentación de  la carretera PR-756 en Arroyo.

Repavimentación de la carretera PR-151 en  Villalba.