El director de Iniciativa Comunitaria, José Vargas Vidot, considera como una pérdida grandísima que el superintendente de la Policía, Héctor Pesquera, haya dejado su cargo.

El líder comunitario que presidía el Comité de Ciudadanos nombrado por el ex gobernador Luis Fortuño para colaborar con la reforma, dijo que mientras estuvo en la entidad pudo observar que Pesquera “fue diligente en llevar la Policía a una dimensión de servicio y operación profesional y comunitaria”.

“A nivel del impacto de la Policía, en el tiempo de Pesquera, como yo estoy en las calles, puedo ver claramente que la Policía estaba teniendo un impacto continuo en la interdicción”, dijo.

“Había tenido éxito en tocar dimensiones del tráfico de droga, que en otras circunstancias no se habían tocado. Se notaba la ausencia de heroína en las calles y eso quiere decir que la estrategia de Pesquera de poder unir de forma concertada las organizaciones de la agencia federal con la Policía, surgió el éxito esperado. Haciendo la salvedad de que el crimen no se arregla con la Policía. Es un fenómeno mucho más complejo”, apuntó.

La forma en que se ha hecho la interdicción en la administración de Pesquera, agregó, fue mediante una estrategia más afinada y consistente con lo que es tocar el tráfico de droga en dimensiones superiores.

Según Vargas Vidot, el advenimiento del  monitor representa un gasto adicional a un país que está agobiado moralmente, con y la pretensión de que un solo individuo que ni siquiera vive aquí, pueda efectuar el milagro de eliminar la criminalidad, lo que “es nuevamente una inducción al error”

“Yo no soy amigo de Pesquera. Yo estoy hablando de la operación fiscal de él. Yo entiendo los derechos civiles. El tener de nuevo que traer a alguien agringado, es como si nosotros no supiéramos o no se nos concediera la capacidad de poder hacer valer nuestros propios derechos y necesitáramos siempre el cuido paternalista de una instancia totalmente impertinente a Puerto Rico, como es el gobierno federal”, dijo.