La Comisión de Boxeo Profesional de Puerto Rico deberá entregar copias certificadas de las minutas de las reuniones ordinarias y extraordinarias de los pasados dos años en o antes del lunes 11 de mayo. Los documentos formarán parte del expediente de un proceso administrativo que se lleva a cabo desde el pasado noviembre para resolver las querellas que pesan sobre el comisionado José “Toto” Peñagarícano y, a su vez, del juez de boxeo rentado César Ramos.

Hiram Morales, oficial examinador especial nombrado por Ramón Orta -secretario de Recreación y Deportes- presentó una petición por escrito de la cual Primera Hora obtuvo una copia. Morales ordenó la entrega de las minutas que comprenden el periodo desde 1 de enero de 2013 hasta el 28 de abril de 2015.

Relacionadas

“Las minutas o actas deberán estar acompañadas de una certificación firmada por el presidente de la Comisión de Boxeo (Rafael Nadal) a los efectos de que los documentos requeridos y entregados son copia fiel y exactas a los documentos públicos bajo la custodia de la Comisión”, lee el documento firmado por Morales el 29 de abril.

La documentación solicitada parece ser el último eslabón que Morales necesita para presentar a Orta un informe final con los hallazgos y unas recomendaciones que serán consideradas por el secretario del DRD. De hecho, Orta se reunión con Morales en al menos tres ocasiones, pero las conclusiones todavía no ha sido reveladas.

Morales presidió un puñado de vistas administrativas para atender unas reclamaciones de Peñagarícano y Ramos por una serie de irregularidades con unas tarjeta oficial del pleito entre el puertorriqueño José “Wonder Boy” López y mexicano Roberto Castañeda en agosto de 2014. Ramos reclamó públicamente que alguno de los comisionados que laboraron durante el evento alteró indebidamente la anotación del primer asalto del combate donde López resultó ganador por decisión mayoritaria. El experimentado juez ha dicho consistentemente que anotó el episodio 10-7 por las cuatro caídas que sufrió López durante los tres minutos de duración y salió a relucir que Peñagarícano se le acercó durante el sexto asalto para que “arreglara” la anotación a 9-7.

La génesis de la controversia por las anotaciones descansa en que el juez Carlos Colón se acercó a la mesa oficial para solicitar que se le permitida cambiar la puntuación de 10-7 a 9-7. Fue entonces cuando los comisionados Dommys Delgado, Daniel Cabán y Miguel Ortega determinaron que la anotación correcta era 9-7. Cabán alega que encomendó a Peñagarícano para que le solicitara a los jueces Ramos y José Roberto Torres que también cambiaran sus respectivas hojas a 9-7. Solamente Ramos se negó.

El eventual cambio en las tarjetas de Ramos y Torres permitió que López saliera victorioso con anotaciones finales de 74-72, 74-72 y 73-73 para retener el cetro de la Federación Caribeña de Boxeo, afiliada al Consejo Mundial de Boxeo (CMB), versión de las 122 libras.

A raíz de los señalamientos de Ramos, Peñagarícano radicó una querella contra el juez por “ difamación” y, además, violaciones al reglamento vigente de la Comisión de Boxeo.

 

El ex director ejecutivo de la Oficina de Ética Gubernamental escuchó los testimonios de todos los funcionarios de la Comisión que estuvieron presentes en el evento, así como Nadal, un perito en caligrafía y Francisco “Paco” Valcárcel, presidente de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).

Se especula que Orta ofrecerá sus determinaciones el 28 de mayo.