Caguas. La victoria de las Leonas de Ponce el domingo sobre las Criollas de Caguas en el segundo partido de la serie final de la Liga de Voleibol Superior Femenino (LVSF) no solo igualó la ronda de campeonato a una victoria por bando, sino que ayudó a las melenudas a salir del letargo que demostraron durante el primer choque celebrado el pasado jueves en la cancha Salvador Dijols.

Ponce superó otro inicio lento y de poca energía y sacó la importante victoria que les permitirá ir en busca de tomar la delantera, 2-1, para el tercer choque que se jugará el martes en el Auditorio Juan “Pachin” Vicens de la Perla del Sur.

“En el primer parcial (del juego del domingo) sucedió lo mismo que en el primer choque: no pudimos controlar las emociones, nos metimos demasiada presión y el juego no fluía. En el segundo set tuve que tocar un poco el ego deportivo de cada una de las jugadoras y después de ese parcial vieron que sí podían”, destacó el dirigente de las Leonas, José Mieles.

Tal y como mencionó la acomodadora Natalia Valentín al concluir el primer choque del pasado jueves, las Leonas pagaron, quizás, por su poca experiencia en series finales y que para el partido de anoche tenían que mejorar en todos los aspectos. Y así lo hicieron, en especial con la recepción y la defensa, resaltó Mieles.

“Pudimos recibir y defender, aparte de que logramos involucrar ofensivamente a nuestras centrales y fueron en momentos dados porque la recepción llegó. Y tenemos que seguir para mantener a las medios involucradas y hacerlos pensar un poquito más (en la defensa y bloqueo)”, añadió Mieles.

Por su parte, el técnico de las Criollas Juan Carlos Núñez indicó que la ofensiva falló por momentos, al igual que la recepción y, por ende, no pudo meter en el juego a sus centrales como lo hizo en el primer partido de la final.

“El primer parcial lo dominamos de buena manera con una buena distribución ofensiva y buena defensa en la malla, pues bloqueamos cinco balones en el set. Pese a que arrancamos atrás en el segundo set, estuvimos en la pelea pero ellas ejecutaron mejor al final. En el cuarto set, pese a que tuvimos ventaja de 20-16, no tuvimos la fuerza pare terminar las jugadas con muchos ataques neutros, aunque ellas defendieron bien la malla”, resaltó Núñez.

“Ofensivamente no estuvimos a la altura y mi recepción, en un momento dado, también dejó mucho qué desear con balones fuera de la zona. No pude involucrar mucho a mis centrales, y por ende, sus centrales no estuvieron pendientes a las mías, sino que se trasladaron más hacia las esquinas”, añadió el veterano dirigente.