Doña Carmen Osorio jamás imaginó que su nieto Jaime de León Hernández fuese capaz de secuestrar, torturar y asesinar a su inquilino, Raymond Román Agosto.
11 de agosto de 2013 • 7:55pm
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
Regístrate para recibir a tu email nuestro periódico en su versión digital.
Al suscribirte aceptas nuestros Términos y Política de privacidad. Pronto comenzarás a recibir nuestro newsletter.
Te invitamos a descargar cualquiera de estos navegadores para ver nuestras noticias: